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Las claves del Testamento solidario: uno de cada 3 euros
Una herramienta que no solo refleja los valores del testador, sino que también permite que su generosidad trascienda el tiempo.
Valencia - Publicado el
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El pasado 13 de noviembre se conmemoró el Día del Testamento Solidario, una iniciativa que busca promover la idea de continuar ayudando a quien más lo necesita, incluso después de nuestra muerte. Esta forma de colaboración altruista consiste en incluir a una organización no lucrativa en el testamento, garantizando que una parte del patrimonio del testador se destine a causas benéficas.
Cada vez más personas optan por esta vía solidaria, motivadas no solo por el deseo de perpetuar su compromiso social, sino también al asegurarse del destino de su decisión. Javier Molpeceres, abogado y coordinador de la asesoría jurídica de Cáritas, subraya la importancia de esta figura legal en una entrevista en el programa Mediodía de Cope Más Valencia, "en torno a la tercera parte de los ingresos que percibe Cáritas, la ONG de la Iglesia en la actualidad, procede de herencias y legados, y en menor cantidad de donaciones puntuales".
Una de las principales ventajas del testamento solidario es que las donaciones están exentas del impuesto de sucesiones. “Esto asegura que el 100% de la cantidad donada llegue directamente a la ONG, lo que permite a las organizaciones maximizar el impacto de cada euro recibido”, señala Molpeceres.
Este tipo de testamento no solo permite que las personas sigan apoyando las causas que les importaron en vida, sino que también ofrece una forma tangible de ayudar a quienes más lo necesitan: ya sea en proyectos de investigación médica, atención a personas mayores, protección de los Derechos Humanos, educación, o preservación del medio ambiente, entre muchas otras. Molpeceres destaca que “el testamento solidario es una herramienta flexible y sencilla, que no requiere grandes cambios en las disposiciones testamentarias habituales, y que permite hacer una diferencia real con cualquier tipo de legado, sea grande o pequeño”.
Lo que muchas personas desconocen es que no hace falta tener un gran patrimonio para hacer un testamento solidario. “No es solo cosa de grandes fortunas”, comenta Javier Molpeceres, añadiendo que cualquier donación, por pequeña que sea, puede tener un impacto significativo si se suma a otras. “Hemos visto casos en los que una pequeña herencia ha permitido financiar proyectos destinados a los sectores más desfavorecidos o apoyar a centros de acogida de personas sin hogar”, recalca.
Otro aspecto importante es que el testamento solidario no afecta negativamente a los herederos principales. Según Molpeceres, “es posible incluir una donación sin que ello signifique desatender a los seres queridos. De hecho, el testamento solidario puede reservar un porcentaje de la herencia para la entidad a la que se dona, sin afectar la legítima de los herederos directos”.
En cuanto a curiosidades, Molpeceres destaca las peculiaridades que pueden rodear a los testamentos solidarios. En ocasiones los herederos no siempre están conformes con las disposiciones testamentarias. "Hemos vivido muchas cosas, ¿no? Herederos disgustados que nos han ocultado algún bien, alguna cuenta bancaria, por ejemplo, y se la han apropiado. También hemos tenido casos de personas cercanas al testador que no estaban de acuerdo con las decisiones", señala.
En algunos casos, la situación puede complicarse por la falta de información. “A veces nos enfrentamos a testamentos en los que la persona no tiene relación conocida con nadie. Puede ser muy secreto, o simplemente una persona muy solitaria que hizo un testamento a favor de Cáritas, pero sin ningún familiar que nos aporte detalles sobre qué bienes o cuentas bancarias dejó”, añade Molpeceres. Este vacío de información puede dificultar la ejecución del testamento, lo que obliga a Cáritas a investigar más a fondo para descubrir el patrimonio legado.
Una historia especialmente curiosa involucra a una familia de varios hermanos que, al ir falleciendo uno tras otro, fueron dejando su patrimonio al siguiente. "Al final, el último en morir testó a favor de la ONG de la Iglesia, lo que permitió que todo el patrimonio acumulado por la familia llegara a nuestras manos, junto con otras entidades", explica el abogado, destacando cómo, en algunos casos, las herencias solidarias pueden tener un recorrido largo y sorprendente antes de llegar a su destino final.
La jornada del Día del Testamento Solidario busca concienciar sobre esta forma de dar continuidad a la solidaridad más allá de la vida. Un simple gesto en vida puede transformar el futuro de personas vulnerables, mejorar la investigación médica, proteger el medio ambiente o defender los derechos fundamentales de miles de individuos. Y lo más importante, es un proceso sencillo: “Basta con expresar en el testamento la voluntad de legar una parte del patrimonio a una ONG, ya sea en forma de dinero, bienes inmuebles o incluso obras de arte”, explica el abogado de Cáritas.
Así, el testamento solidario se está consolidando como una herramienta que no solo refleja los valores del testador, sino que también permite que su generosidad trascienda el tiempo. Cada vez más personas eligen esta opción, conscientes de que, incluso en su ausencia, pueden seguir haciendo el bien y apoyando las causas que han marcado su vida. En palabras de Javier Molpeceres, “un testamento no es solo un documento legal; es también un legado de valores”.