El motivo por el que los ciclomotores ya no se ven en Valencia: "No tenerle miedo"

En la memoria de los que ya tenemos una edad está esa matrícula vertical y amarilla tan característica de los ciclomotores. El característico ruido se apoderaba de las calles de las grandes ciudades como Valencia, pero desde hace unos años a esta parte ese sonido y esas matrículas, casi han desaparecido, la venta de este medio de transporte ha descendido. Las motos de 50 centímetros cúbicos cada vez son menos habituales en los núcleos urbanos.

De hecho, según la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas, Anesdor, el descenso de ventas en los ciclomotores en los últimos años. Varias son las causas que los expertos atribuyen al descenso de este tipo de vehículos.

Entre ellas, la compatibilidad de poder acceder a una moto de 125cc, tras dos años de haber obtenido el carnet de conducir.

El factor que no sabías y que ha afectado a la venta de ciclomotores

La movilidad verde, sostenible, es uno de los factores determinantes, sobre todo, entre los jóvenes que ven como alternativa al ciclomotor el patinete. Menor precio, fácil de adquirir y cómo de transportar.

Benito Velasco, inspector de policía judicial de tráfico de la Policía Local de Valencia, reconoce en COPE que “la gente joven, sin la necesidad es de obtener un permiso de conducir, pueda acceder a un medio de transporte que le permite trasladarse por toda la ciudad y que además en la mayoría de casos es compatible su uso con el del transporte público. Como se suele decir, miel sobre hojuelas, es un medio de transporte que para ellos es maravilloso, pero tenemos ese hándicap de que es gente muy joven, que en comparación el perfil de usuario de la bicicleta, pues es todo lo contrario, gente más madura, que en la mayoría de casos sí que tiene formación vial y que respeta las normas, además de, bueno, pues a la juventud hay que unir ese inconformismo, ese no tenerle miedo a nada, tenemos un cóctel complicado de convivencia”.

El patinete, un problema de convivencia

En Valencia, en estos primeros seis meses del año se han puesto más de 2.000 multas a patinetes, entre otras cuestiones por no llevar casco, por ir con más de uno ocupante en el vehículo o por directamente circular por la acera.

Benito insiste en que el mayor problema de la convivencia entre peatones, patinetes, bicis y vehículos es la edad, y hace alusión a un estudio de la Universidad Politécnica de Valencia en el que se analizaron los carriles bici de la ciudad de Valencia para ver qué tipo de usuarios eran los que utilizaban cada uno de los medios de transporte.

“De todo ese análisis de los datos y de lo que nosotros también recabamos en las inspecciones y campañas que hacemos es que el perfil de la persona usuaria de los patinetes eléctricos son gente entre 16 y 30-35 años, y no han pasado por una escuela de conductores, porque antes pasaban mínimamente para sacarse una licencia de ciclomotor”, describe Veslasco.