A licitación las obras de rehabilitación de la comarcal entre Sierra de Fuentes y Cáceres hacia la N-521

Las obras de rehabilitación del firme de la carretera CC-26.1, de Sierra de Fuentes a la N-521, han salido a licitación en la plataforma de contratación del Estado, por lo que las empresas interesadas ya pueden presentar ofertas, hasta el día 24 de este mes, con un coste de 350.000 euros.

Estas obras se enmarcan en el Plan de Carreteras Provincial 2021/2022 y tienen un enorme interés para la zona, explica el diputado de Infraestructuras Territoriales Inteligentes y Movilidad, Fernando García Nicolás, “porque es la principal comunicación de la localidad de Sierra de Fuentes con Cáceres, y tiene una intensidad media diaria de vehículos muy cercana a los 3.000, y un índice de pesados de 2,78%”.

Se aborda así una primera intervención para arreglar el firme y, posteriormente, se trabajará en otro proyecto, de 81.000 euros, para reforzar el carril de uso exclusivo de bicicletas.

La vía CC-26.1 presenta, tal como apunta García Nicolás, un nivel deficitario de servicio por su irregularidad y deterioro superficial del pavimento, además de un avanzado agotamiento estructural. Por lo tanto, las actuaciones contempladas en el proyecto abarcan la totalidad de la plataforma de 9 metros de ancho y toda la longitud de la carretera, 2.424 metros.

Se eliminarán los deterioros existentes y se regularizará, en la medida de lo posible, las rasantes, terminando con la renovación del pavimento existente.

Por otra parte, esta vía, añade el diputado, tiene una particularidad, y es que a su plataforma, de 9 metros de ancho, adosado a la franja formada por calzada y arcenes, incorpora un carril para uso exclusivo de bicicleta (en la margen derecha, sentido Sierra de Fuentes).

En la actualidad, la división entre ambos usos, automóviles (calzada y arcenes) y bicicletas, queda separada solamente por la diferente coloración y marcas viales longitudinales, de ahí que se prevea, con la siguiente actuación, y 81.000 euros, la instalación de una barrera metálica de seguridad como elemento físico de delimitación y contención, en aras de la seguridad vial.

Mientras, hasta que se instalen las barreras, en las obras a licitación, para la diferenciación de usos se mantendrá el mismo criterio actual: por coloración. “Y ya con la próxima instalación de la barrera de seguridad también existirá un elemento físico contundente de separación”, concluye el diputado.