El desempleo baja en Extremadura, pero ¿realmente hay oportunidades?
Álvaro lleva dos meses buscando trabajo en Mérida sin éxito
Mérida - Publicado el
2 min lectura
Extremadura ha experimentado una notable reducción en su tasa de desempleo en el tercer trimestre de 2023. Según la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística (INE), el paro ha bajado en 7.400 personas, situándose en 68.900 desempleados. Con este descenso del 9,7% en comparación con el trimestre anterior, la tasa de paro regional se ubica ahora en el 13,79%, la más baja en un tercer trimestre desde 2007. Además, el número total de ocupados ha alcanzado los 430.600, la cifra más alta de la serie histórica para este periodo.
La Realidad de Muchos: La Historia de Álvaro
Sin embargo, los buenos datos no garantizan que todos los trabajadores de la región encuentren empleo con facilidad. Para personas como Álvaro, un joven extremeño con experiencia en administración, logística y restauración, la búsqueda de un trabajo se ha convertido en una verdadera carrera de fondo. Hace apenas unos meses, Álvaro se mudó a Mérida por motivos personales, dejando su trabajo anterior con la esperanza de comenzar de nuevo en la capital extremeña. Sin embargo, tras semanas de búsqueda activa, sigue sin encontrar un puesto que se ajuste a su perfil.
"Llevo un mes viviendo aquí en Mérida, y desde un mes antes estoy desempleado. Dejé mi anterior trabajo para venir aquí, pero se me va a terminar la prestación en unos meses y no he tenido suerte buscando empleo. He entregado currículums por todas partes y tanto mi pareja como yo seguimos buscando, pero nada. Las prestaciones se acaban, las ayudas son limitadas, y al final uno necesita un trabajo estable para salir adelante. La situación aquí en Extremadura es muy complicada," relata Álvaro.
Los Retos en la Búsqueda de Empleo en Extremadura
La historia de Álvaro es una entre muchas en la región. Aunque Extremadura ha creado 11.400 empleos en el último trimestre, el 32,95% de los menores de 25 años siguen desempleados. Además, el 23,87% de los asalariados tienen contratos temporales, lo que supone un gran obstáculo para quienes buscan estabilidad. En sectores como la restauración, donde Álvaro tiene experiencia, las oportunidades laborales suelen ser de corta duración, lo que dificulta el desarrollo de una carrera a largo plazo.
La esperanza es que, con el descenso continuado del desempleo en la región, se generen cada vez más empleos estables y accesibles para personas con distintas trayectorias laborales y educativas. A pesar de los buenos datos, el caso de Álvaro y otros trabajadores en su situación muestran que queda mucho camino por recorrer para que todos los extremeños puedan beneficiarse de una economía regional en crecimiento.