Todos los elementos de la Casa Cornide (A Coruña), protegidos desde este lunes

La Casa Cornide, inmueble situado en la ciudad vieja de A Coruña en propiedad de los herederos del dictador Francisco Franco, goza desde este lunes del régimen de protección patrimonial como Bien de Interés Cultural (BIC). Así se establece tras la incoación del expediente para declararla como tal.

La publicación oficial del expediente, hecha este lunes en el Diario Oficial de Galicia (DOG), supone la aplicación del marco de protección que establece la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia para los BIC. Esta consideración estará vigente hasta la resolución del proceso, para la que se establece un máximo de dos años desde este 24 de mayo.

El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, ha resaltado, en declaraciones a los medios este lunes en Santiago, que la incoación del expediente para su declaración como BIC es una "actuación desde la perspectiva del patrimonio a instancias del Ayuntamiento de A Coruña" que "no altera otros regímenes vinculados a la propiedad". Ha apuntado que la consideración como BIC supone "simplemente" fijar una protección desde el punto de vista de protección patrimonial "sin a entrar a presumir la propiedad o la no propiedad de un bien".

En este sentido, después de recordar que los propietarios de un BIC están sujetos a una serie de permisos y condicionantes ante la Dirección Xeral de Patrimonio para actuar sobre ese bien, el conselleiro ha remarcado el hecho de que Cornide esté ya protegida con la simple incoación del expediente, por lo que ha restado importancia a los "tiempos" para su resolución, que seguirán los márgenes "ordinarios".

EXPEDIENTE

Y es que la incoación del expediente, que tiene un plazo formal para su resolución de 24 meses, supone la aplicación inmediata de un régimen de protección provisional para el inmueble en su conjunto. Por lo tanto, todos los elementos de Casa Cornide, desde las fachadas al as carpinterías, parámetros exteriores, volumen y composición arquitectónica y constructiva, están sujetos desde este lunes al régimen de protección que establece la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia para los bienes de interés cultural y para los monumentos en particular.

La resolución de la Consellería de Cultura publicada este lunes en el Diario Oficial de Galicia (DOG) incide en el "carácter destacado" de la Casa Cornide como "un ejemplo muy escaso" de la arquitectura residencial de la época de la Ilustración en Galicia. También pone de relieve en la "gran calidad" material y de composición y el "grado muy alto" de integridad entre sus estructuras y la formalización, que hace que el inmueble de la ciudad herculina presente elementos "únicos" tanto en la planificación constructiva como en estilo y ornamentación arquitectónica.

Asimismo, el departamento de Patrimonio Cultural valora el hecho de haber sido residencia de José Andrés Cornide Folgueira y Saavedra, una de las personalidades "más destacadas" en Galicia y España del Siglo de las Luces. Al tiempo, resalta el lugar que ocupa en la Ciudad Vieja de A Coruña y el "amplio reconocimiento social" de este inmueble.

DESDE EL SIGLO XVIII A LOS FRANCO

El expediente realiza un repaso histórico de esta construcción, que se remonta a mediados del siglo XVIII, cuando Diego Cornide y Saavedra, padre de José Andrés Cornide Folgueira y Saavedra, levantó la actual casa gracias a una "inversión extraordinaria" en el emplazamiento que ocupaba la residencia de la familia Folgueira-Cornide. La casa fue el hogar de José Cornide, que residió en el inmueble en varias etapas hasta que 1789 se mudó a Madrid para dedicarse de pleno a sus tareas en la Real Academia de la Historia.

Tras la muerte de Cornide, la casa pasó a ser habitada por su hija para, más tarde y después de varias herencias, terminar en manos de su última propietaria, Carmen Vázquez Pardo. En 1949, la vende al Ministerio de Educación Nacional. La intención del Gobierno era transformar el inmueble en un conservatorio de música y declamación, aunque finalmente el proyecto fue desechado en 1960, cuando la casa fue permutada por el Ministerio de Hacienda al Ayuntamiento de A Coruña.

Por su parte, el consistorio herculino cede la casa y la adjudica a Pedro Barrié de la Maza, quien, poco después, la vende a Carmen Polo, esposa del dictador Francisco Franco. Tras esta operación, concluye Patrimonio, el inmueble fue rehabilitado para recuperar su funcionalidad residencial, siendo usada por los herederos de Franco especialmente entre los años 1975 y 1988.