La historia de la Alameda de Santiago, el parque más impresionante de Compostela
La Alameda se construyó en el siglo XIX, pero ya antes era un espacio utilizado por los vecinos
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Además de la Catedral y del casco histórico de Santiago, uno de los puntos de obligada visita en Santiago de Compostela es la Alameda, un parque urbano de 85.000 metros cuadrados situado en pleno casco histórico. Desde él se pueden disfrutar, por ejemplo, de vistas privilegiadas de la fachada barroca de la Catedral de Santiago.
El paseo da Ferradura bordea la "carballeira de Santa Susana" y recorre un espacio ajardinado cubierto con robles, tilos, chopos y todo tipo de vegetación traída a la capital gallega desde todo el mundo.
La Alameda es a día de hoy un parque urbano lleno de vida que quiere homenajear, además, a la cultura y a la literatura. Esculturas de Rosalía de Castro, de Ramón María del Valle-Inclán o de Isaac Díaz Pardo saludan a los visitantes. Recientemente se ha inaugurado también una estatua de Federico García Lorca, en recuerdo del tiempo que el poeta pasó en Compostela.
Un castro en Santa Susana
Dicen los historiadores que antes de la llegada de los romanos a Galicia en la zona en la que se encuentra el parque de la Alameda había un castro. Estaba en la zona alta, donde se ubica la iglesia de Santa Susana, y recibía el nombre de "Outeiro dos Poldros".
Según explica la web municipal especializada en parques Compostela Verde cuando en el silgo IX surge la ciudad de Santiago la alameda era una zona boscosa que lindaba con la zona urbana. A través de ella se accedía a la Porta Faxeira, una de las entradas que tenía la muralla que entonces rodeaba Compostela.
La Porta Faxeira era el lugar por el que entraban, por ejemplo, los pescaderos que traían productos de mar desde Pontevedra o Padrón.
En el SXII se construye la iglesia de Santa Susana
Fue el arzobispo Gelmírez el que en el siglo XII encargó contruir una iglesia en la parte alta de la zona en la que hoy en día está la Alameda. La intención era albergar en el templo las reliquias de Santa Susana que se habían traido desde Braga.
En esa época los terrenos eran propiedad de los Condes de Altamira, y en la zona baja tenían influencia también los monjes franciscanos que tenían un monasterio en la zona de San Lourenzo.
Fue en 1546 cuando fueron cedidos al ayuntamiento con la condición de que no fuesen cerrados ni arrendados. En ese momento se plantaron robles, chopos y fresnos ("freixos", en gallego) por parte de los vecinos de las zonas rurales de Santiago.
El "Campo da Estrela", como origen de la Alameda actual
Tenemos que esperar hasta el siglo XIX para ver como las fragas al sur de Porta Faxeira se empiezan a convertir en un parque. En 1835 se construye el "Campo da Estrela" un paseo ajardinado en la zona más próxima al casco histórico que será el germen de lo que hoy conocemos como Alameda.
El paseo de la Ferradura se construyó entre 1.835 y 1850 con inspiración francesa. La intención era crear un espacio donde pudiesen pasear los compostelanos y hacer vida social. Ver a los vecinos y ser vistos.
Esa Alameda originaria poco a poco ha ido creciendo hasta llegar a los 85.000 metros cuadrados actuales. Con el tiempo se instalaron faloras y se construyó el Palco de la Música que aún se conserva hoy en día.
La última reforma importante de la Alameda se acometió en 1990. Se reparó entonces en enlosado de granito y se sustituyó la red de abastecimiento y saneamiento de aguas.
A día de hoy, además de lugar de paseo y de deporte para residentes en la capital gallega la Alameda es el espacio en el que se celebran las fiestas de la Ascensión, muy populares en toda la comarca de Santiago.
Allí se instalan las atracciones de feria y también se celebran eventos como las ferias del libro o se instala la pista de hielo durante las semanas de Navidad.
Horario de apertura
La carballeira de Santa Susana está abierta las 24 horas, pero el paseo central de la Ferradura cierra por las noches. El horario varía en función de la estación.