Una visita feminista y un libro para celebrar el 8M en Santiago

En el S.XV, en Santiago, había una mujer cirujana. Se llamaba Leonor Garrido. Trabajó mucho tiempo a la sombra de su esposo, que ejercía la misma profesión, pero cuando él falleció, ella continuó y "se la nombra como que hacía muy bien su trabajo". La primera mujer que accedió a la universidad en Santiago fue Manuela Barreiro Pico: corría el 1896 y para empezar a estudiar Farmacia necesitó, claro, de autorización paterna y también, del Estado. Sin embargo, está documentado que siglos antes, en la Edad Media, las mujeres boticarias estaban "bien consideradas": es el caso de Elvira Pérez o Teresa González do Portal... siglo XIV y siglo XV respectivamente.

Son nombres y profesiones de mujeres escondidos a lo largo de la historia que coge de la mano paseando por Compostela  María Otero. Ella es guía turística en su ciudad natal  y ha querido rescatar la historia de las mujeres en Santiago: en su caso, no podría haber modo mejor que diseñando una  visita temática. 

El papel de la mujer era más importante de lo que se pensaba...no sólo eran esposas, madres, prostitutas o monjas.

María Otero

Guía turística e historiadora del Arte

Historiadora del Arte además de guía, durante algo más de dos horas María hace un recorrido por distintos enclaves de la zona histórica, mencionando, eso sí, protagonistas que no son los habituales "porque en general, la historia la han escrito los hombres", señala. En la fachada del actual rectorado, en el arco "hay representadas no una, sino cinco mujeres", explica; en la Praza da Quintana, la gente se sorprende cuando se adentra en el fenómeno de la peregrinación y señala la altísima presencia de mujeres en el Camino, "casi tantas como hombres", asegura. 

Frente al monasterio de San Paio de Antealtares, María repasa qué significaba ser monja y quién acababa en los conventos en Santiago, y caminando por la rúa Nova se detiene junto a otras mujeres que suenan más y que también estuvieron vinculadas a  Compostela, como Emilia Pardo Bazán  o Rosalía de Castro. "Pero también me encontré con otras tantas que pasaron desapercibidas, como Cecilia Cardarelly, primera fotógrafa en Galicia... y de las que su legado apenas ha trascendido nada"

María lleva diez años trabajando como guía en Santiago y ha querido poner su grano de arena para "que la gente viera qué significaba ser mujer en la tercera ciudad de la cristiandad". Reconoce que pensó sobre todo "en la gente de aquí, porque el público más general que llega a Compostela no tiene tanto interés en este tema". Hace un gesto casi de resignación y reconoce que entre el público de casa, son "sobre todo mujeres" las que se acercan a conocer la capital gallega con perspectiva de género. Ella, en todo caso, no tira la toalla. 

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Cedida

Carmen Villar pone voz a un fragmento del poema colectivo con el que arranca Cereixas Roubadas

"cereixas" para luísa villalta

Cerca de donde María nos invita a detenernos en rincones con nombre de mujer, este 8 de Marzo la librería Lila de Lilith  acoge  la presentación de la nueva propuesta literaria del colectivo feminista Comadres das Letras. Siguiendo la estela de su primera obra colectiva, "Contármonos" (Alvarellos Editora, 2023), vuelven con la mujer como motivo central.

Cereixas Roubadas combina prosa, verso, textos teatrales e incluso caligramas, elaborados por trece creadoras que han sumado sus voces para homenajear a la poeta Luísa Villalta, a quien estuvo dedicado el día das Letras Galegas 2024. Arranca con un poema colectivo a modo de renga, un formato inventado por las poetas japonesas que enlazaban un poema con el siguiente a partir del último verso de cada composición. Carmen Villar, una de las "comadres", le puso voz para Cope Santiago a un fragmento de ese primer poema.