Operación Congregatorium: la Guardia Civil de Lugo desmantela una organización que estafaba a congregaciones religiosas de toda España
Los tres miembros de la banda suplantaban la identidad de superiores jerárquicos y usaban a "mulas" para mover el dinero que obtenían con su actividad delictiva
Lugo - Publicado el - Actualizado
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Agentes de la Guardia Civil de Lugo, en el marco de la Operación Congregatorium, ha identificado a los tres miembros de "una sofisticada trama delictiva especializada en la comisión de estafas a congregaciones religiosas".
Según ha informado la Comandancia de Lugo, el modus operandi de esta banda consistía en suplantar la identidad de religiosos con un nivel jerárquico superior para obtener dinero mediante llamadas telefónicas a las congregaciones que eran víctimas de la trama.
Previamente, los supuestos estafadores realizaban "un análisis exhaustivo en redes sociales, publicaciones y noticias en fuentes abiertas de Internet". Gracias a esa información, disponían de datos suficientes para suplantar telefónicamente a personas que ocupaban niveles jerárquicos superiores a sus potenciales víctimas.
Posteriormente, utilizaban "tácticas elaboradas para ganarse la confianza de las congregaciones". En ese sentido, "los roles y responsabilidades de esos líderes religiosos, cuyas identidades suplantaban, contribuían al funcionamiento de la comunidad religiosa, lo cual facilitaba a los estafadores la solicitud de envío de determinadas cantidades de dinero".
Para no despertar sospechas, los miembros de la trama valoraban incluso la capacidad financiera de cada tipo de comunidad.
"mulas" para mover el dinero
Además, "el verdadero artífice y líder del grupo", precisa la Guardia Civil en un comunicado, reclutaba "mulas de dinero" que eran inmediatamente reemplazadas por otros individuos cuando el engaño era descubierto. De ese modo, podía mantener sus "operaciones delictivas sin interrupciones".
Estas "mulas" ponían a disposición de la trama cuentas bancarias abiertas en diversas entidades españolas y actuaban como intermediarios en las operaciones ilícitas, a cambio de una comisión por el dinero que sacaban en cajeros automáticos para entregárselo al cabecilla de la organización.
"Esta actividad delictiva causaba importantes perjuicios económicos a las congregaciones afectadas", explica la Guardia Civil, que también aclara que está banda actuaba por diferentes provincias "de la geografía nacional".
En el marco de esta operación "han sido identificadas tres personas residentes en las provincias de Madrid y Toledo". Se da la circunstancia de que uno de los sospechosos ya estaba en prisión por hechos similares.
La investigación ha sido desarrollada por el Equipo de Investigación Tecnológica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Lugo.