Así es el Belén Gigante de Viveiro: el más grande de Galicia

Tiene más de cien figuras a tamaño real y ocupa 2.000 metros cuadrados de extensión. Cada año lo montan cuatro personas, con la colaboración de algún eventual, y les lleva un mes entero, con jornadas de lunes a domingo a 12 horas diarias. Pero el resultado merece la pena. Cada año les gusta más que el anterior, creen que se van superando.

Es un poblado real, con sus gremios, vendedores de cántaros, pieles, pan, flores, telas, alpargatas, el herrero, un encantador de serpientes, pescadero, lechera... no faltan, claro, las figuras del Misterio y los Reyes Magos, los pastores y hay hasta gallinas; estas de verdad y son las más visitadas. El impulsor, Jesús Atadell, nos cuenta que "son unas quicas que están en un recinto cerrado, hay gente que va a visitarlas y quiere verlas todos los días a ver cómo van".

maniquíes, poliestireno, fibra de vidrio...

Las figuras están hechas en varios materiales, unas son maniquíes vestidos de la época, otras piezas están realizadas en poliestireno estruido, como los muros de las edificaciones, o en poliéster como los animales, también tienen embarcaciones en fibra de vidrio. Toda una labor de paciencia y manualidades que atesoran y engrosan con el paso de los años. 

El lugar de ubicación también es estratégico, en el entorno de la Iglesia de Santa María. Todo allí, hasta la iluminación, nos retrotrae al pasado y nos hace sentirnos en el verdadero Belén.

HERODES SE POSICIONA EN BELÉN

Por supuesto no falta Herodes, que hasta ahora se mantenía apartado en un edificio distinto, en su trono y con sus soldados, pero que este año se ha colado en el mismo seno del poblado despertando el terror de los moradores.

Entre las novedades del Belén de este año, además del cambio de ubicación de Herodes, han colocado el portal en otro espacio. Antes construían un portal para la familia del Niño Jesús, pero este año han colocado las figuras en un portal de verdad, que está medio en ruinas. Se trata del portal de la Casa Rectoral que "ofrece la imagen adecuada para poder establecer allí a la Sagrada Familia". Hay unas puertas viejas y una escalera medio ruinosa que "se presta", de hecho había un farol que ya pertenecía al portal que queda genial, "sólo tuvimos que retocar cuatro cosas".

El nacimiento, “Viveiro ante O Berce”, que así se llama, se puede visitar todos los días de 10 de la mañana a 12 de la noche y se mantiene abierto hasta pasar la Navidad.

RECOGER ES TODA UNA MUDANZA 

Luego llega el momento de recoger y es aún peor que lo de montar, como una verdadera mudanza: "lo de guardarlo es un horror porque es... uf, piezas, piezas, piezas, es como una pequeña mudanza, y cuando te parece que ya te queda poco, aún te queda una semana".

El Belén Gigante de Viveiro no lleva sólo ese nombre porque sea grande y con figuras de tamaño real, es el más grande de Galicia y de los más llamativos y peculiares de España. Cada año lo visitan miles de personas que buscan en ese entorno una brizna de la ilusión navideña.