Trabaja 40 años en un colegio de Lugo y alucina por lo que hacen los alumnos cuando se jubila: "Abre puertas"

Una profunda huella deja entre la juventud de Burela el profesor Bernardo Penabade, quien se acaba de jubilar en medio de un emotivo homenaje de los alumnos del Instituto Perdouro.

Le han hecho el paseillo por los corredores y escaleras del instituto, con ovaciones y aplausos, además de choques de manos y muchos abrazos. Un ejemplo del cariño que los jóvenes sienten por un profesor que les entiende y ven cercano.

La despedida le ha parecido al homenajeado "una actividad muy reconfortante, muy bien organizada, muy cariñosa", está muy agradecido con todos los que lo organizaron y participaron. Señala que "fue bonito, la educación como punto de encuentro".

Puertas a la vida

Explica que 40 años de trabajo dan pie a que "modestamente haya ayudado a mucha gente, yo creo que es la demostración de que la escuela abre puertas a la vida, así lo encaré desde el primer día y salgo de la enseñanza reglada con esa filosofía". Espera seguir ayudando a la comunidad educativa siempre que lo precise, aún fuera del ámbito académico.

En su largo recorrido profesional, Bernardo Penabade ha sabido llegar a los estudiantes al margen de sus edades o color de piel. De hecho siempre ha defendido la integración y ha puesto en marcha el Modelo Burela para conseguirlo.

Aunque no siempre fue fácil alcanzar esa deseada integración, como él mismo cuenta "soy un mecánico de mantenimiento de la atención a la diversidad y, en muchas ocasiones, aunque mi misión fue siempre la de promover la inclusión, pues... fui yo el excluido"

Una estrategia educativa

El Modelo Burela es un programa de intervención educativa que ayuda a salvar las distancias con las personas migrantes, dado que en Burela hay 42 nacionalidades distintas.

Se trabaja con el alumnado en situación de fracaso escolar. Impulsa una acción educativa en colaboración con los servicios sociales y asociaciones culturales, deportivas y recreativas, como agentes de inclusión social. Y funciona. Cuenta Bernardo Penabade que en cuatro años de aplicación se logra, pero ya con dos años se consiguen resultados.

Enmarcado en el Modelo Burela se desarrolla otro proyecto que atrapa a los alumnos, es una radio escolar, se llama Proyecto Neo. Ofrece a los jóvenes la oportunidad de desarrollar sus habilidades comunicativas, expresarse, al tiempo que realizan una actividad divertida y dinámica.

Proyecto Neo es una intervención destinada a la incorporación a la cultura gallega de personas que no tuvieron el gallego como lengua materna. Desde el mes de enero de 2012 da a conocer experiencias de nuevos hablantes que pueden servir de modelo para otras personas que necesitan estímulo para iniciar ese proceso.

El educador se eterniza en cada ser que educa

Penabade siempre ha sido un defensor de la lengua, la tradición, la cultura gallegas y ha apostado por los jóvenes, creyendo en sus posibilidades. Una frase define el trabajo desarrollado por el docente es “El educador se eterniza en cada ser que educa”. Esa máxima le han dedicado en la despedida.

Se va con la satisfacción del trabajo bien hecho y dejando la puerta abierta a todos, espera seguir ayudando a los jóvenes también fuera del ámbito académico.

Han sido 40 años de trabajo en los que su leit motiv era la “profesionalidad, pasión y constancia”.