Celia, la frutera que superó un cáncer con la ayuda del Balonmán Cangas

La vida y el deporte están íntimamente ligados. Y más en pueblos pequeños como puede ser el caso de Cangas do Morrazo. El balonmano es allí una auténtica religión y congrega, cada fin de semana, a miles de aficionados con las gargantas prestas para animar a su equipo del alma.

Ese es el caso de Celia, que regenta una frutería en la localidad y que es una muy fiel seguidora del conjunto cangués. "Yo de pequeña empezaba a ir con mi madre, y en O Gatañal ya fue la explosión más grande. Tienes que estar en el 'fervedoiro' para que esto se te meta en las venas", nos contaba en el programa del martes de Deportes COPE en la provincia de Pontevedra.

A Celia le diagnosticaron un Linfoma de Hodgkin en el año 2013. "Por las pruebas que me hacían sabía que me estaba pasando algo grave, pero yo la noticia la recibí bien, porque soy muy positiva. La enfermedad me ayudaron a superarla mi familia, mis amigos, mis hijos, mi marido, mis padres... Todos fueron importante en el proceso. Ahí te das cuenta de la gente que te quiere", nos contaba emocionada.

Ella misma reconocía que ahora, ya curada, la vida le estaba dando una nueva oportunidad. Celia dice que encontró consuelo en aprovechar la enfermedad para ayudar a otras mujeres con el mismo problema y realizar actividades que antes, por el trabajo, no podía, como dedicar más tiempo al balonmano, una de sus grandes pasiones. "Ayudaba en la asociación a otra gente con cáncer, empecé a hacer teatro, me involucré más en el balonmano y empecé a ayudar más al club", confiesa Celia.

LA SORPRESA DE DANI FERNÁNDEZ

Dani es uno de los jugadores más destacados que han pasado por Balonmán Cangas en los últimos años. Ahora juega en el Sttutgart alemán, pero mientras formó parte de la plantilla que dirige Nacho Moyano, forjó una especial relación con Celia y no quiso dejar pasar la oportunidad de saludarla en directo. "¡Qué te cuente qué contrato le hice a Dani!", decía Celia, que surtía de fruta a Dani y al resto de sus compañeros.

"Yo soy muy familiar y enseguida me abro a todos los jugadores, y Dani es encantador", nos explicaba la protagonista. "Bueno, Celia, estoy muy contento de haber participado en esta sorpresa que la mereces y a seguir animando a Cangas", se despedía el jugador de Celia.

Y es que, como dice el lema del club, 'En Cangas ninguén se rende'. Celia es el mejor ejemplo.