cultura
Salvaterra (Pontevedra) tira de ingenio para prolongar el horario de su biblioteca municipal
Los usuarios de la biblioteca pueden disfrutar de las instalaciones hasta las doce de la noche del domingo

Vigo - Publicado el
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El horario de funcionamiento de la biblioteca pública ha dejado de ser un obstáculo para estudiantes y opositores de Salvaterra de Miño (Pontevedra) que tanto partido extraen a unas instalaciones en las que ahora pueden pasar bastantes más horas de las que pasaban no hace tanto.
Y es que los usuarios de la biblioteca ya no necesitan de la presencia de un empleado municipal para acceder a las instalaciones; les basta con una tarjeta, parecida a las que abren puertas en los hoteles, que les franquea la puerta.
"Todo se basa en las demandas de nuestros usuarios y lo que tienes que hacer es una lectura de las instalaciones que tenemos", ha explicado en COPE la concejala de Cultura de Salvaterra, Lorena Soto.
"Llevamos notando esa demanda de nuestros estudiantes, opositores, que necesitan un horario mucho más amplio para el estudio al que nosotros no podemos llegar", continúa para explicar que las posibilidades económicas del concello son las que son, pero que la demanda en la biblioteca las desborda.
"Debido a las últimas cifras de noviembre, con 800 personas que han pasado por la biblioteca, valoramos implantar un sistema de acceso autónomo en el que nuestros usuarios a través de una tarjeta que previamente solicitan en el concello pueden acceder a las instalaciones de lunes a jueves de ocho de la mañana a diez de la noche y de viernes a domingos, de 8 de la mañana a doce de la noche", desgrana.
la figura del bibliotecario sigue
Eso no significa que en Salvaterra hayan eliminado la figura del bibliotecario, la cual continúa siendo imprescindible, pero sí permite que la biblioteca funcione como espacio de estudio, sala de consulta o incluso como lugar de reunión para la realización de trabajos gracias a una sala polivalente.
La tarjeta se consigue tras subir un formulario y las tarjetas son personales, asociadas a un nombre y un DNI, lo que trata de garantizar "un uso responsable de las instalaciones" por parte de los usuarios. Por si acaso, todos los accesos quedan registrados. Y en el interior de la biblioteca hay cámaras que todo lo ven. Se consigue así evitar las tentaciones de quien pueda pensar para la biblioteca municipal de Salvaterra utilidades que no le son propias.
Hasta el momento, el Concello ha repartido ya medio centenar de tarjetas y todo hace indicar que el numero de poseedores de estas llaves tan especiales seguirá creciendo para hacer de esta iniciativa pionera en la comarca todavía má últil de lo que ya es.