Guardia Civil
Incautan cerca de 900 kilos de almeja ilegal que iba desde Portugal a Cambados
La Guardia Civil interceptó la furgoneta en la que trasladaban este producto en la N-550 a la altura de Mos.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Inacuatan en Mos cerca de 900 kilos de almeja ilegal. La operación fue llevada a cabo agentes de la Guardia Civil encargados de localizar este aliemtno que circulaba clandestinamente sin la correspondiente guía sanitaria de origen obligatoria para su distribución. La aprehensión de todo este producto se produjo el pasado fin de semana, primero del mes de noviembre, durante el transcurso de un control de seguridad vial llevado a cabo por el Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Porriño. En concreto esta localización se produjo a la altura del kilómetro 158, de la carretera N-550, en el término municipal de Mos (Pontevedra).
La furgoneta en la que trasladaban la almeja ilegal tenía placas con matrícula portuguesa.
En el transcurso de este operativo se interceptó una furgoneta con placas de matrícula portuguesa, que transportaba marisco, procedente de Portugal y con destino a Cambados. Al inspeccionar el vehículo y su carga, los agentes de la Guardia Civil, con el apoyo de efectivos de la patrulla del Seprona de Vilagarcía de Arousa, pudieron comprobar que trasnsportaba en su interior 4.385 kilos de almeja de distintos tipos; de ellos 885 kilos de almeja japónica circulaban indocumentados, por carecer de la preceptiva guía sanitaria de origen.
La inspección concluyó con la inmovilización del vehículo y de su mercancía. El conductor fue denunciado por varias infracciones administrativas porque, además de transportar una partida de marisco indocumentado, también se comprobó que la furgoneta no reunía las condiciones de temperatura requerida para el transporte de este tipo de mercancía y, además, circulaba con exceso de peso, ya que la masa máxima autorizada era de 3.200 kilos.
Con este tipo de actuaciones, que se vienen desarrollando conjuntamente por todas las Unidades de la Comandancia, la Guardia Civil fiscaliza el cumplimiento de la normativa para verificar la trazabilidad del marisco y así poder evitar la comercialización de la mercancía que pudiese resultar nociva para el consumo humano.