Las áreas decantan la balanza en el derbi

Cuando te marcan en el minuto dos todo salta por los aires. Eso es lo que dijo Gustavo Siviero, entrenador del Mallorca B al acabar el partido ante el Atlético Baleares y razón no le faltaba al entrenador mallorquinista puesto que Florin Andone, con un espectacular remate de cabeza, ponía en pie al Estadi Balear cuando algunos de los presentes todavía se acomodaban en su sitio y buscaban la forma de calentar las manos ante el intenso frío reinante en el campo blanquiazul. El delantero rumano mostró lo mejor de su repertorio para decantar la balanza del lado blanquiazul y reivindicar que su vuelta al Atlético Baleares no tiene nada que ver con un retiro dorado si no que tiene mucho más que ver con un renacimiento tras unos meses complicados antes de incorporarse definitivamente al club balearico.

Pero Andone quería más y en un momento en el que el Mallorca B trataba de acercarse para lograr la igualada un pase medido de Rubén Bover lo aprovechaba de nuevo Florin para poner el 2-0 en el marcador y Sergio Moreno ponía el 3-0 cuando mejor estaba el filial mallorquinista que tenía el control del balón y buscaba la forma de poder poner el 2-1 en el marcador de un Estadi Balear en el que se vivió un intercambio de cánticos entre los grupos de animación blanquiazules y del Mallorca. Ambos grupos de aficionados se dedicaron desde cánticos a algún que otro insulto durante los 95 minutos de partido.

El derbi sirvió también para dejar clara la diferencia que, a día de hoy, existe entre el filial bermellón y el equipo de Jaume Mut en el que todo hace indicar que la sociedad que están formado Rubén Bover y el propio Florin Andone va a reportarle muchísimos beneficios a un club, el balearico, que quiere seguir mirando hacia arriba