Un adiós en silencio roto por aplausos y el sonido de un violonchelo, la despedida a la niña muerta en Logroño

Plaza de la Paz de Haro, a la que acudían 4.000 personas. Vecinos jarreros y llegados de otros municipios de La Rioja para despedir Carolina. Un recuerdo para la niña, vecina de la localidad. En la manifestación de duelo por la menor se leía un cartel que decía 'Por Carolina'.

Se encendían varias velas en el suelo.

 En un círculo con velas se colocaban dos peluches.

Un adiós en silencio roto por los aplausos y el sonido de un violonchelo.

Un solista tocaba mientras los asistentes guardaban respeto, sobrecogidos en la despedida a la niña muerta en Logroño y que fue hallada el lunes en la habitación 404 de un hotel, donde su madre, que está ingresada en un hospital en calidad de detenida, intentó suicidarse. El cadáver hallado ayer martes en el río Ebro a su paso por Logroño corresponde al de la abuela materna de la niña de 5 años. A la muerte de la niña se suma esta la aparición del cadáver de su abuela materna.

La presidenta del Ejecutivo riojano, Concha Anreu; la alcaldesa de Haro, Laura Rivado; y el delegado del Gobierno en La Rioja, José Ignacio Pérez Sáenz, han sido algunos de los asistentes a la concentración.

El silencio y el dolor han caracterizado a los concentrados, entre los que no figuraban familiares directos de la menor. Muchas de las personas concentradas no han ocultado sus lágrimas, sobre todo al ver cómo dos niños de corta edad se situaban justo frente a la pancarta en la que se leía "Por Carolina".

Dos niños que han llegado a la plaza mucho antes de la hora prevista para la concentración, igual que muchos ciudadanos, quienes constantemente cruzaban comentarios de incredulidad e indignación por lo sucedido.