La Diócesis riojana y la Guardia Civil elaboran una base de datos conjunta: Robos al patrimonio y a la devoción

La iglesia parroquial de San Andrés de Calahorra ha sufrido una tentativa de robo que se saldó con la rotura de una valiosa vidriera del siglo XX. Pudo haber sido mucho más. Los ladrones no consiguieron llevarse ninguna pieza patrimonial de valor. 

En Calahorra se han producido diferentes robos, en su mayoría de un valor menor, pero existe preocupación por este tipo de actuaciones delictivas.

¿Qué hay detrás de estos robos? ¿Qué pretenden los ladrones con estas sustracciones?. Jesús Ignacio Merino Morga, delegado de Patrimonio de la Diócesis de Calahorra y La Calzada – Logroño, nos explica los tipos de robos que atentan contra este valioso patrimonio.

Y, ¿qué suponen este tipo de robos? Según explica el delegado de patrimonio, estos delitos no solo acaban con un patrimonio de todos sino que también atentan contra los recuerdos, las emociones y la devoción de los riojanos.

Localizar algunas piezas robadas es complicado. Para mejorar esa recuperación, la Diócesis riojana ha elaborado un inventario detallado y trabaja para incrementar la colaboración con la Guardia Civil. Jesús Ignacio Merino explica que se trabaja en una base de datos conjunta entre Diócesis y Guardia Civil.

El santuario del Carmen no es el único templo en Calahorra que ha sido objeto de varios hurtos en las últimas semanas. En la iglesia de los Santos Mártires, en el centro de la ciudad, también han sucedido pequeños robos. En estos casos, hablamos de robos menores tales como ajuar o sillas.

Sin embargo, se producen también robos de envergadura y valor. Las subastas y algunos depósitos de coleccionistas están en el punto de mira para localizarlas. La procedencia debe estar siempre acreditada.