El obispo de La Rioja defiende la integración de los migrantes y rechaza estereotipos: "Es injusto generalizar"

El obispo de la diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, monseñor Santos Montoya, ha calificado de "injusto" generalizar sobre la población migrante y hace un llamamiento a "favorecer, integrar y acompañar" a quienes llegan de otros países en busca de un futuro mejor.

Montoya ha reconocido que la Iglesia "no determina cuántos menores deben ser acogidos en un lugar u otro", pero ha subrayado que "las personas tienen derecho a emigrar".

"Solo hay que mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de cuántas personas forman parte de nuestra sociedad y proceden de otros lugares", explica, insistiendo en que "asociar inmigración con delincuencia es una visión injusta".

El obispo también recuerda que "lo que sucede en Canarias no es solo un problema de Canarias, sino de España y de Europa", por lo que ha pedido "diálogo y soluciones en los países de origen" para abordar el fenómeno migratorio de manera integral.

Viviendas familias vulnerables y jóvenes migrantes

La diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño pondrá en marcha un nuevo proyecto para ofrecer viviendas a familias en situación de vulnerabilidad y a jóvenes migrantes extutelados que, al cumplir la mayoría de edad, deben abandonar el sistema de protección de menores.

Esta iniciativa responde a la creciente dificultad de acceso a una vivienda estable para personas que, pese a haber alcanzado cierta autonomía, continúan enfrentando barreras económicas y sociales. Para ello, la diócesis destinará varios pisos distribuidos por la Comunidad Autónoma, actualmente en proceso de acondicionamiento, para garantizar condiciones dignas de habitabilidad.

apoyo a largo plazo 

El programa contempla la habilitación de entre cuatro y seis viviendas en una primera fase. Estos inmuebles seguirán siendo propiedad de la diócesis y se ofrecerán en régimen de alquiler social, permitiendo a las familias acceder a una vivienda con un coste ajustado a sus posibilidades económicas. En particular, el proyecto está pensado para aquellas familias que han recibido apoyo de Cáritas pero que, al finalizar ese período de asistencia, aún requieren ayuda para lograr una estabilidad definitiva.

La Rioja mantiene la capacidad de acogida "casi al 100%" para menores migrantes no acompañados: Supondría la llegada de 157

Asimismo, la diócesis habilitará espacios para jóvenes migrantes que, al cumplir los 18 años, deben abandonar los recursos de protección de la administración. El objetivo es facilitar su transición a la vida adulta proporcionándoles un entorno seguro que favorezca su integración social y laboral.

Semana Social Diocesana

Monseñor Santos Montoya ha dado a conocer esta iniciativa en el marco de la presentación de la Semana Social Diocesana, que este año se centrará en analizar la realidad de los jóvenes migrantes extutelados. Bajo el lema “Chavales de Nadie: La situación de los jóvenes migrantes”, las jornadas tendrán lugar los días 24, 25 y 26 de marzo en el Espacio Lagares de Logroño, a las 19:00 horas, con entrada libre hasta completar aforo.

Las Semanas Sociales Diocesanas, promovidas por la Conferencia Episcopal Española, buscan aplicar la Doctrina Social de la Iglesia a cuestiones de actualidad y generar un espacio de reflexión y compromiso. En esta edición, la diócesis pondrá el foco en una problemática humanitaria que afecta a miles de menores en España.

Jubileo de la Esperanza 2025

Monseñor Montoya ha subrayado que este proyecto se enmarca dentro del Jubileo de la Esperanza 2025, un tiempo en el que la Iglesia refuerza su mirada sobre los grandes desafíos sociales de nuestro tiempo, como la crisis migratoria y la falta de acceso a vivienda digna.

El obispo ha recordado que la situación de los menores migrantes no acompañados es un reto de gran magnitud, especialmente tras la aprobación del decreto que modifica el reparto de migrantes entre comunidades autónomas. En este sentido, ha alertado sobre la situación en Canarias, donde cerca de 6.000 menores se encuentran en situación irregular, superando la capacidad de acogida de la región y requiriendo una solución urgente a nivel nacional y europeo.

"La Iglesia no puede dar la espalda a esta realidad. Independientemente de su origen, los migrantes necesitan un lugar donde vivir, y en muchos casos han llegado aquí obligados por circunstancias extremas en sus países", enfatiza Santos Montoya, haciendo un llamamiento a la solidaridad y la búsqueda de soluciones justas y efectivas.