El refugio de Logroño para las personas que no tienen hogar: Más de 20 años del Proyecto Alasca

Su historia se remonta a 2003 cuando Aitor Pina, un trabajador social con un enorme corazón, decidió habilitar un espacio sencillo para que estas personas pudieran resguardarse del frío

Manuel Pérez Esteve

Logroño - Publicado el

2 min lectura

Ver nevar gusta a prácticamente todos, pero recuerda que el invierno es un momento muy crudo para algunos. Las temperaturas bajan a menos de cero y, en cada esquina, el frío se cuela por las rendijas de la vida de quienes, sin un techo que los resguarde, deben hacer frente al día y a la noche. 

El proyecto alasca y su función en logroño

Si te hablo del Proyecto Alasca, no me voy a referir a un paisaje helado, no. Esto va de un refugio que desde hace más de 20 años ofrece calor, abrigo y esperanza a las personas sin hogar. Este proyecto no es solo un lugar físico, que está en el edificio Don Domingo Álvarez Ruiz de Viñaspre, ubicado en la calle Los Baños del barrio de La Villanueva, es un símbolo de solidaridad en una ciudad como Logroño que, en noches como la de hoy, se muestra implacable con quienes tienen menos.

La historia de Alasca se remonta a 2003, cuando Aitor Pina, un trabajador social con un enorme corazón, decidió habilitar un espacio sencillo, sin camas ni lujos, pero con el calor humano necesario para resguardarse del frío. Tres años después, en 2006, la Cocina Económica, Cáritas y el Ayuntamiento de Logroño se unieron para transformar esa idea en lo que hoy conocemos como Proyecto Alasca.

el refugio de los que no tienen hogar

Con 36 camas y una pequeña cocina para calentar algo de comida, un caldo o un café, este proyecto que lleva actualmente el Ayuntamiento de Logroño, con la colaboración de otras entidades, es fundamental para la gente sin hogar en la capital riojana. 

Durante estos crudos inviernos, cuando la noche se vuelve cerrada y el frío cala hasta los huesos, el Proyecto Alasca se erige como un calefactor para cientos de personas a lo largo del invierno.

LA LABOR DE LOS TRABAJADORES DE ESTE PROYECTO

¿Cómo funciona? ¿Cómo se lleva a las personas que lo necesitan hasta la calle Los Baños? En Alasca, un equipo comprometido de trabajadores sociales recorre la ciudad, calle a calle, con un mensaje a quienes ven que lo necesitan, es un mensaje muy sencillo, "Ven conmigo que te ofrezco un lugar con calor y seguro para ti".

No importa quién seas ni las circunstancias que te hayan llevado a la calle, la puerta está abierta y la ayuda es gratuita. Es la calidez humana lo que marca la diferencia en estas noches heladas. Educadores y profesionales se mimetizan con la gente, rompiendo barreras de vergüenza o problemas de salud mental, y animándolos a acercarse a un centro que les ofrece más que un refugio: les ofrece dignidad.