La Rioja reforzará la autoridad del profesor y la mediación para resolver conflictos en clase con el nuevo Decreto de Convivencia

La Consejería de Educación de La Rioja ha presentado el anteproyecto del nuevo Decreto de Convivencia, una iniciativa que busca mejorar la gestión de los conflictos en los centros educativos, reforzar la autoridad del profesorado y promover la implicación de toda la comunidad escolar. Este marco normativo, compuesto por 69 artículos distribuidos en cinco títulos, será sometido a consulta por el Consejo Consultivo y el Consejo Escolar, y entrará en vigor en el próximo curso escolar.

Mediación pilar de la convivencia

El decreto propone la mediación como herramienta principal para resolver discrepancias. A través de la figura de un mediador independiente aceptado por ambas partes, se buscará reparar el daño y fomentar la reconciliación entre los implicados. Según Alberto Galiana, consejero de Educación y Empleo, “este enfoque garantiza una gestión pacífica de los conflictos, evitando la escalada de problemas y promoviendo un entorno seguro y equilibrado”.

La gestión de conflictos ocupa un tiempo valioso que debería dedicarse a enseñar

Luis

Director de un colegio de Logroño

Autoridad del profesor

Una de las novedades más destacadas es la recuperación y fortalecimiento de la autoridad del profesorado, un aspecto que, según el gobierno regional, había sido menoscabado en los últimos años. El nuevo decreto reconoce la presunción de veracidad de los docentes en el ejercicio de sus funciones y garantiza su defensa jurídica en casos relacionados con su labor.

Luis, director de un colegio de Logroño con 35 años de experiencia, explica que la convivencia en el aula es un reto diario. “La gestión de conflictos ocupa un tiempo valioso que debería dedicarse a enseñar. Es fundamental que los profesores cuenten con respaldo y herramientas claras para afrontar estas situaciones”, comenta en una entrevista con COPE Rioja.

Diálogo y sanciones 

El decreto busca un equilibrio entre el diálogo y las medidas socio educativas, reservando las sanciones más severas como último recurso. Entre las conductas graves definidas están el acoso, la grabación de agresiones o acciones que pongan en peligro la salud. En estos casos, se contempla la expulsión del centro si no existen alternativas viables.

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El nuevo marco también establece un catálogo de derechos y deberes para alumnos, profesores y familias. La colaboración familiar será clave para el éxito del modelo, como destaca Luis: “La convivencia es una responsabilidad compartida. Los docentes gestionamos el aula, pero la implicación de las familias marca la diferencia”.

Hacia una convivencia compartida

La normativa actual ha mostrado debilidades e indefiniciones que dificultaban la resolución efectiva de conflictos. Este nuevo decreto pretende corregir estos problemas, incorporando elementos positivos del marco anterior y añadiendo mejoras sustanciales.

Con esta iniciativa, el Gobierno de La Rioja busca no solo abordar los conflictos en las aulas, sino también fomentar una cultura de respeto, responsabilidad y participación activa en toda la comunidad educativa.