Condenada por robar 2.356 euros de una sucursal bancaria de Pamplona: "Llevaba un cúter, actuó bajo la influencia de alcohol y anfetaminas"

La titular del Juzgado de lo Penal nº 2 de Pamplona ha condenado a 21 meses de prisión a una mujer que en junio de 2024 atracó con un cúter una sucursal bancaria de Pamplona, de la que se llevó 2.356,78 euros, una cantidad que deberá ahora devolver en concepto de responsabilidad civil.

Según han indicado desde el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), los hechos declarados probados en la sentencia, que ha sido dictada de conformidad tras un acuerdo entre la fiscalía, la acusación particular y la defensa, son constitutivos de un delito de robo con intimidación en establecimiento abierto al público con la concurrencia de la atenuante cualificada de toxicomanía.

Sobre las 9.15 horas del 7 de junio de 2024, la acusada entró en la sucursal del Banco de Santander de la avenida de Marcelo Celayeta de la capital navarra "con la intención de obtener un enriquecimiento ilícito". Una vez en su interior, saltó dentro del mostrador de caja y exigió dinero al empleado. Mientras tanto, ella fue cogiendo dinero en billetes y monedas que había a la vista. Lo guardó todo en una bolsa de deporte que llevaba.

Seguidamente, según se narra en la sentencia, "con una actitud muy nerviosa", la procesada mostró un cúter y reclamó más dinero al empleado. Este, "ante el comportamiento conminatorio de la encausada", le permitió que siguiera guardando en la bolsa el resto del dinero que había a su alcance en un dispensador.

La mujer, que ingresó en prisión provisional al día siguiente del atraco, presenta un trastorno por consumo de múltiples drogas y sustancias psicotrópicas. Los hechos enjuiciados, según recoge la resolución judicial, fueron a consecuencia del consumo de alcohol y anfetaminas.

Con anterioridad al juicio, celebrado el pasado día 7, el fiscal solicitaba una condena de 4 años de prisión, mientras que la acusación particular, ejercida por la entidad bancaria, reclamaba 5 años.

En la sentencia, que es firme, la magistrada, antes de decidir sobre la suspensión de la pena de prisión, ha acordado que la condenada sea examinada por un médico forense para que indique "cuál es el tratamiento más adecuado a seguir para su estado y, de esta manera, pueda imponérsele en su caso como condición para evitar el ingreso en prisión". Además, a la inculpada se le ha prohibido el acceso durante 3 años a la referida sucursal bancaria.