Un financiero advierte que la economía influye en la salud y deja un consejo: “Como mi abuela Juanita”

Aunque no lo parezca, la economía puede afectar, y mucho, a nuestra salud. A nuestro bienestar. Carlos Medrano, economista de EXIMIA y profesor de Economía de la UPNA, indica que hay un informe de un estudio de Cigna Salud que indica que el estrés financiero es la segunda causa de estrés para los españoles. Este estrés puede provocar “problemáticas de presión arterial, problemas de sueño”, e incluso pueden derivar en “depresión y obesidad”. Y todo proviene de esa “preocupación financiera”. 

Carlos Medrano indica que los informes PISA demuestra un preocupante analfabetismo financiero de los más jóvenes. Con lo que la educación financiera de los españoles no parece que vaya a mejorar en los próximos años.

Uno de los principales problemas que puede generar este estrés financiero es la falta de ahorro, personas que se endeudan más de la cuenta. La sociedad está perdiendo la sana costumbre del ahorro. “Mi abuela Junita decía 'soy pobre, pero tengo ahorros'”. Hoy en día, indica Medrano, se está perdiendo esta capacidad de ahorro “a pasos agigantados”. Cuanto más se gana, más se gasta. “La gente tiene una creencia social errónea, que es gastar más nos va a hacer más felices. Y eso parece que es el capitalismo, cuando eso no es el capitalismo”.

¿Qué puedo hacer para vivir más tranquilo?

Siempre que se pueda, hay que intentar ahorrar el 10% de la nómina. Ese es el principal consejo de Carlos Medrano, aunque muchas veces se hace complicado poderlo hacer. Y una vez que ya se haya conseguido “un colchón”, hay que “saber invertirlo”. Tienes que aprender a invertir. Es decir, que el primer gasto es una inversión en conocimiento, para que sepas invertir ese dinero”.

El economista advierte, de todas formas, que las malas prácticas financieras pueden acabar afectando a todos. “Va a pasar dos cosas con la gente que no está preparada, que no sabe gestionar el dinero: que van a gastar demasiado y que además la ignorancia es atrevida, se van a meter en cosas que luego se van a dar el tortazo”. Y eso, indica Medrano que “perjudica a todos”, porque el futuro de uno depende “de cómo le vaya al vecino”.

“Tenemos que volver a los básicos, como mi abuela Juanita”. Su abuela Juanita, relata Medrano, sólo tenía tres bombillas en una lámpara donde había para seis bombillas: “Con esto ya vemos suficiente”.