Una influencer navarra explica el diferente origen entre los huevos blancos y los marrones: "Os va a parecer mentira"

La navarra Sara Ardanaz ha explicado en su Instagram el origen de los huevos blancos y marrones

Una gallina con un huevo marrón y blanco
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Sara Ardanaz explica el origen de los huevos blancos y marrones y su relación con la gallina

Alberto Sanz

Pamplona - Publicado el

4 min lectura

La navarra Sara Ardanaz, que actualmente se encuentra en la India aprendiendo y explicando sus andanzas en su perfil de Instagram (@sara_ardi5), ha contado en un reel la explicación de cuál es el origen de los huevos blancos y los marrones. La influencer ya avanza y avisa que "os va a parecer mentira".

Una mañana de domingo, mientras se encuentra en su pueblo dando de comer a las gallinas y realizando otras actividades habituales del mundo rural aprovecha para desvelar algo que la "gente de ciudad" desconoce, y es la diferencia de procedencia de los huevos blancos y marrones.

En un divertido reel de Instagram, mientras pregunta a su gallina Lola "¿y las demás qué?", por comer demasiado y no compartir, va mostrando la vida rural de su pueblo. La navarra vive en un pueblo cerca de la capital de la Comunidad Foral, Pamplona.

Tras alegrarse y compartir la alegría contagiosa de que pongan huevos por la mañana de esta manera tan especial: "¿Habéis puesto huevos? ¡Sí, han puesto huevos!". En ese instante desvela una de las claves del origen de los huevos blancos y marrones.

"Esto se parece mentira, pero es verdad. Las gallinas blancas ponen los huevos blancos y las gallinas marrones ponen los huevos marrones" explica Sara en su reel de Instagram. Tras lo que vuelve a reñir a la gallina Lola y le reprocha: "¿Te quieres esperar a comer? Solo estás comiendo tú, ¿eh, Lola?".

Sara sigue luego con sus actividades del mundo rural como dar de comer maíz y heno a la yegua, esquivando "las mierdas del suelo" o arreglar una valla que estaba rota, por lo que tenía que sacar los palos, ya que estorbaba.

Nuevas multas de hasta 3.000 euros por no registrar gallinas de autoconsumo

El Gobierno español ha implementado una nueva normativa que obliga a los propietarios de gallinas de autoconsumo a registrar sus aves, so pena de enfrentar multas significativas. Esta medida, que entró en vigor el 1 de enero de 2024, busca mejorar la trazabilidad y el control sanitario de las explotaciones avícolas en todo el país.

El Real Decreto 637/2021, aprobado en 2021 pero cuya aplicación se pospuso hasta 2024 para las explotaciones existentes, establece las normas básicas de ordenación de las granjas avícolas. Según esta normativa, todos los propietarios de gallinas, incluso aquellos que las utilizan únicamente para consumo propio, deben inscribir a sus animales en el Registro General de Explotaciones Ganaderas.

Las sanciones por incumplimiento de esta nueva regulación pueden ser severas. Las multas oscilan entre 600 y 3.000 euros, al considerarse una infracción leve. Sin embargo, en casos más graves, como el incumplimiento de normas de bienestar animal, las sanciones podrían alcanzar cifras mucho más elevadas.

La normativa no solo exige el registro de las aves, sino que también establece una serie de obligaciones para garantizar el bienestar de los animales. Entre estas se incluye la prohibición de intervenciones quirúrgicas que no sean por motivos terapéuticos, la necesidad de proporcionar acceso a una yacija o cama en buenas condiciones, y asegurar un suministro adecuado de agua en cantidad y calidad.

Además, las explotaciones de autoconsumo deben identificar a un veterinario de referencia al que poder recurrir en caso de problemas sanitarios. Esta medida busca prevenir y controlar posibles brotes de enfermedades que podrían afectar tanto a las aves como a la salud pública.

La implementación de esta normativa ha generado cierta controversia, especialmente en zonas rurales donde la cría de gallinas para autoconsumo es una práctica común y arraigada. Muchos propietarios desconocen aún la obligatoriedad del registro, lo que ha llevado a las autoridades a intensificar las campañas de información.

En algunas regiones, como Galicia, se han reportado largas colas en las oficinas de la administración autonómica para regularizar las instalaciones animales. La Xunta de Galicia ya ha registrado más de 44.000 gallineros, lo que demuestra la magnitud del impacto de esta nueva normativa.

Se espera que esta medida contribuya a largo plazo a mejorar la salud y el bienestar de las aves de corral

Gallinas de autoconsumo

Posibles multas

Las autoridades argumentan que el registro obligatorio es crucial para fomentar condiciones adecuadas de higiene y cuidado en las granjas avícolas, incluso en las más pequeñas. Además, facilita el control y seguimiento por parte de las autoridades competentes, permitiendo una mejor trazabilidad en caso de brotes de enfermedades o problemas sanitarios.

A pesar de las molestias iniciales y el descontento de algunos propietarios, se espera que esta medida contribuya a largo plazo a mejorar la salud y el bienestar de las aves de corral en España, así como a garantizar la seguridad alimentaria de los consumidores.

Es importante destacar que, aunque la normativa es estricta, las autoridades han mostrado cierta flexibilidad en su aplicación inicial. En algunos casos, se podrá recibir solo un apercibimiento si se considera que no hubo dolo y el propietario no ha sido sancionado en los últimos dos años por infracciones similares.

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