Berakah busca voluntarios para llegar a más personas en riesgo de exclusión social en Vitoria

Berakah, la obra social de las parroquias del Casco Histórico de Vitoria-Gateiz, busca nuevos voluntarios para llegar a más personas en riesgo de exclusión. Y es que la Diócesis de Vitoria quiere aumentar la cifra de los 300 voluntarios con los que cuenta en la actualidad para "garantizar la buena respuesta" en los 38 servicios que ofrece a la ciudanía gasteiztarra. En una entrevista en COPE Euskadi, Miren Ochoa, colaboradora de Berakah desde hace 16 años, insiste en la necesidad de mayor ayuda a consecuencia del incremento de la demanda de personas necesitadas. "Este año hemos acogido a más de 4.000 familias, hemos dado 47.000 comidas y diaramente atendemos a 12 personas sin techo", asegura.

En cuanto a los requisitos generales para ser voluntario, Ochoa insiste en que "la puerta está abierta a todo el que quiera entrar", pero es importante que la gente esté "comprometida" con la causa, ya que se trata de "gente que nos necesita" y a la que no se puede dar la espalda en cualqueir momento. Además, recalca la importancia de "la disponibilidad", como también "la empatía, la sensibilidad o la capacidad de trabajo en equipo".

La colaboradora de Berakah deja claro que "manos nunca son suficientes" y que "cada año" el número de personas necesitadas sube", por lo que no se "llega a todo". Por ello, hace un llamamiento a todas aquellas personas que quieran participar para que se unan a "la familia Berakah". Además, las personas que se animen a donar su tiempo libre en ayudar, tendrán una formación inicial así como un acompañamiento durante las primeras semanas a modo de formación continua.

"Cuantos más seamos, más podremos hacer"

Entre los 38 servicios de Berakah, Ochoa destaca algunos en los que más voluntarios se necesitan como el de la atención a familias que no tienen un techo en el que dormir; el mercado, ropero y despensa solidaria con productos de primera necesidad; varios programas para jóvenes y menores; gestión de recursos alimenticios y comedores; mantenimiento y reparación de instalaciones; clases de castellano para adultos; catequesis; el centro de escucha; o la unidad móvil para atender a mujeres víctimas de la trata y la prostitución.

Los horarios para los voluntarios varían en cada uno de estos 38 servicios dependiendo además de los grupos que se formen para repartirse el tiempo. Además, hay un grupo de voluntarios que se dedican a visitar personas enfermas o en soledad no deseada por toda la ciudad creando lazos de amistad para paliar esta situación.