Los Bancos de Alimentos del País Vasco necesitan ayuda solidaria para restaurar sus reservas

Los Bancos de Alimentos en el País Vasco hacen una llamada a la solidaridad, instando a la participación en la próxima "Gran Recogida" de alimentos en supermercados durante el próximo fin de semana. Esta iniciativa cobra especial relevancia en Bizkaia, donde los almacenes se encuentran "prácticamente vacíos" debido a los efectos de la inflación, a pesar de haber recibido más donativos en 2022 que en años anteriores.

Aunque el Banco de Alimentos de Bizkaia registró un aumento en las donaciones el año pasado, la inflación ha obligado a reducir la dieta básica que proporcionan a los beneficiarios. "Con igual presupuesto, ahora podemos adquirir menos alimentos", señalan fuentes del Banco vizcaíno, subrayando la urgencia de la campaña de recogida de este año ante la escasez casi total de los almacenes.

La entidad en Bizkaia atiende a 20,700 personas distribuidas en 8,000 familias necesitadas, incluyendo 4,000 menores, entre los cuales 540 son lactantes. Con la recogida programada para los días 24 y 25 de noviembre, se espera alcanzar, al menos, los objetivos del año pasado, recaudando alrededor de 1,200,000 euros entre donativos y alimentos a través del "bono-alimento".

El Banco de Alimentos de Álava conmemora su 25 aniversario y, para celebrarlo, ha leído un manifiesto recordando la lucha contra la "injusticia radical del hambre". Actualmente, atienden a 1,396 familias, incluyendo 3,624 adultos y 129 niños. Su próxima campaña de recogida, que se llevará a cabo el próximo viernes y sábado en 83 establecimientos, tiene como objetivo reunir 40,000 kilos de comida, 140,000 euros en bonos de supermercados y 75,000 euros en donaciones directas.

En Gipuzkoa, el Banco de Alimentos ha logrado reunir más de 2,532,510 kilos hasta noviembre y espera superar los 3 millones en total. La presidenta del Banco, Belén Méndez de Vigo, destaca que este año las estanterías están llenas, gracias a la gran recogida realizada en mayo. Invitan a la sociedad guipuzcoana a participar como voluntarios o contribuyendo con productos o bonos, ya que, debido a la inflación, se necesita una mayor aportación económica para atender al mismo número de personas.