RACVN y asociaciones de consumidores vascas piden a Ayuntamiento Bilbao retirar el límite de velocidad a 30

El Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN), la Unión de consumidores de Euskadi (UCE), la Asociación de Consumidores y Usuarios Vasca (EKA/ACUV) y la Federación de consumidores de Euskadi (EKE-FCE) han pedido al Ayuntamiento de Bilbao en un manifiesto conjunto que "recapacite" y retire la medida 'Bilbao a 30'. En el escrito proponen como alternativas "adecuar la velocidad a cada tipo de vía, fomentar el transporte público, apostar por la pedagogía y la formación cívica y crear parkings disuasorios seguros con lanzaderas subvencionadas".

Los firmantes del manifesto han expresado en un documento conjunto "su descontento y disconformidad, de manera pública y oficial, con la medida puesta en marcha por el Ayuntamiento de Bilbao de establecer la limitación de velocidad de 30 kilómetros hora en sus vías". Asímismo, han instado al Consistorio a que "atienda a las razones expuestas en el documento para replantearse su decisión y dar marcha atrás".

Los presidentes de las asociaciones de consumidores, Koldo Nabaskues (EKA), Ana Alzaga (UCE) y Jon Ariño (EKE) y el presidente del RACVN, Pedro Martínez de Artola, han firmado durante la comparecencia el manifiesto, en representación de sus respectivas organizaciones, en un acto desarrollado en la sede del RACVN en Bilbao en el que también ha tomado parte el director del RACVN, Eduardo Martínez.

Las cuatro organizaciones han destacado que la reducción a 30 por hora de la circulación en todo el casco urbano para reducir las emisiones de gases contaminantes y aumentar la seguridad vial, no son "argumentos válidos, sino excusas, ya que no aportan ningún estudio que avale dichas afirmaciones".

Los firmantes del manifiesto han replicado que la medida "produce efectos contrarios a los supuestos pretendidos, afecta negativamente en la movilidad de empresas, organizaciones y particulares, para los que el uso de su automóvil o vehículo profesional resulta imprescindible e insustituible e incide de manera negativa en el comercio local".

También, desde su punto de vista "dificulta su abastecimiento y al mismo tiempo disuade a los consumidores de acudir a la ciudad a realizar sus compras frente a los centros comerciales situados en las afueras (sin OTA, sin límite 30 y con parking gratuito).

A su vez, afecta "negativamente y dificulta el desempeño de las labores profesionales de los colectivos como taxis, repartidores o conductores de autobuses, aumenta el consumo de combustible y con ello el gasto para los usuarios y puede producir un deterioro prematuro de los vehículos (embragues, filtros de partículas, etc)".

MEDIDA RECAUDATORIA

En su opinión, los vehículos con motores de combustión interna, "no están pensados y fabricados para circular a 30 kilómetros por hora" y la decisión presupone que "todos los usuarios pueden prescindir de su vehículo, sin considerar porqué se utiliza el automóvil en cada caso particular".

Igualmente, "expone a los conductores a una circunstancia completamente artificial que aumenta las posibilidades de ser multados, pese a conducir de manera cívica y responsable" y la medida "puede pasar a convertirse en una medida recaudatoria que penalice a los conductores por el uso de su vehículo".

Por todo ello, las cuatro organizaciones proponen "adecuar" la velocidad a cada tipo de vía y sus circunstancias y coinciden en que "no se trata de aumentar el límite de velocidad en todas las vías, sino de adecuarla en cada lugar, acorde con sus circunstancias concretas (ancho de vía, visibilidad, tráfico, afluencia de otros colectivos, etc), para garantizar la fluidez del tráfico y la seguridad vial, al mismo tiempo".

Asimismo, han destacado que no se han quitado, pese a la normativa ciudad 30, los resaltes en las carreteras para reducir la velocidad.

Desde su perspectiva, hacer de Bilbao una Villa más amable, menos contaminante y más segura, reduciendo y atemperando el tráfico, cuando ya se encargan de ello, en buena medida, los semáforos, los pasos de peatones, los carriles bicis, no se consigue con restricciones como las propuestas en Bilbao a 30, sino que hay otras acciones que "hay que tener en cuenta y que se debieran implementar" como son, "más frecuencias y horarios en el transporte público, abaratarlo, hacer más pedagogía ciudadana y formación cívica e implementar parkings disuasorios con medidas de seguridad y lanzaderas subvencionadas.

Las asociaciones han concluido criticando que "la decisión se haya tomado de manera unilateral, sin tener en cuenta las distintas realidades de movilidad de las personas o las asociaciones".

Por todo ello, y mediante este manifiesto quieren mostrar "públicamente su rechazo a la medida y alertar sobre sus consecuencias negativas", por lo que instan al Ayuntamiento de Bilbao a que recapacite y atienda a las razones expuestas en el documento para replantearse la decisión y dar marcha atrás".