Zaldibar, un año después de la catástrofe del vertedero
Se han convocado movilizaciones para pedir la localización del cuerpo de Joaquín Beltrán y el Gobierno Vasco visitará la escombrera para conocer la situación real
Madrid - Publicado el - Actualizado
6 min lectura
365 días han pasado desde que una de las peores catástrofes medioambientales de Euskadi pasara a formar parte de la historia. Hoy, 6 de febrero del 2021, se cumple un año del desprendimiento del vertedero de Zaldibar y las peores predicciones se han cumplido: todavía hay muchas preguntas en el aire y pocas respuestas. Este sábado se celebra el aniversario de un derrumbe que se saldó con la vida de dos operarios vizcaínos que quedaron sepultados entre los residuos, Alberto Sololuce y Joaquín Beltrán, éste último todavía sin haber sido localizado. Tanto 112-Sos Deiak como los especialistas en emergencia de la Ertzaintza se centran ahora en la localización del cuerpo sin vida del trabajador.
Actualemente, la búsqueda está focalizada en la conocida zona B4s, donde una de las dos grandes lenguas del vertedero arrastró los residuos hasta un caserío ubicado en las inmediaciones de la escombrera. Sin embargo, si la localización acaba por ser fallida, el equipo de policía rastreará otras "dos zonas más de búsqueda, las llamadas B1b y B1c", indicaba la consejera Arantxa Tapia.
Con motivo del aniversario, el vicelehendakari primero, Josu Erkoreka, junto con la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, se acercarán hoy hasta el vertedero para conocer la situación real de las actuaciones. Además, la plataforma 'Zaldibar Argitu' ha convocado movilizaciones en diferentes localidades del territorio en protesta por la situación y para pedir "reponsabilidades" por lo ocurrido.
UNA FAMILIA DESTROZADA
La familia de Joaquín Beltrán teme que se pudiera sellar el vertedero de Zaldibar sin haberse encontrado al trabajador. En declaraciones a COPE, la abogada de la familia del desaparecido, Estefanía Rojo, asegura que están viviendo estos días con "con mucha dureza" aunque no pierden la "esperazanza". Sin embargo, la falta de resultados en la búsqueda hace que los parientes se encuentren "como en el 6 de febrero de 2020" y su mayor temor es que que el basurero pueda cerrarse sin haberse localizado el cuerpo de la víctima. "Quieren que los responsablen respondan conforme marca la ley pero ahora mismo su obsesión es que aparezca Joaquín lo antes posible y que no se selle el vertedero sin sacarlo", asegura la abogada.
Sobre el procedimiento judicial penal y medioambiental, que se llevan a cabo en el juzgado de Durango, la abogada ha concretado que "se encuentra en la primera fase" y que, además, posiblemente se ainstruido por la misma persona. También insiste en que la familia de Beltrán considera que "se provocaron daños en el lugar que generaron el desprendimiento y el fallecimiento" de su familiar, por lo que reclama un delito de homicidio imprudente.
Después de varios incendios que contaminaron de amianto el aire y el agua durante meses de las localidades colindantes al vertedero como, Eibar, Ermua o Zaldibar, y de estabilizar el terreno para llevar a cabo las labores de búsqueda en la zona donde fueron vistos por última vez, en agosto del año pasado se localizaron restos óseos de uno de ellos. Se trataba del cuerpo de Sololuce. Un hallazgo que supuso esperanza para las familias de ambos trabajadores que llevaban 6 meses sin noticias de sus allegados. Sin embargo, la felicidad no era completa porque todavía no se había encontrado a Beltrán. Rojo no duda en recordar que la aparición de los restos ósesos Sololuce, supuso una bocanada de aire para la familia. "Les dió muchísima alegría y moral porque no están preparados para que se selle el vertedero sin que aparezca Joaquín".
MOVILIZACIONES
La plataforma 'Zaldibar Argitu' ha convocado para el este sábado varias concentraciones con motivo del aniversario. Las manifetaciones tendrán lugar en varias localidades de Bizkaia y Gipuzkoa durante todo el día, en concreto, se producirán concentraciones por la mañana en Zalla, Elgeta y Makiña Xemein y por la tarde en Zaldibar, Eibar y Ermua. La plataforma, que se ha caracterizado por aclarar lo sucedido durante todo el proceso de búsqueda, incluso en el confinamiento con la organización de caceroladas desde los balcones, volverá a pedir "responsabilidades" una vez más.
Sin embargo, la platafoma no es la única, el sindicato LAB se ha sumado a estas movilizaciones. En un comunidado, El sindicato ha insistido en que "el desastre" de Zaldibar tiene "responsables políticos". Según ha recordado, "tras 6 meses y 10 días desaparecido", se hallaron los restos de Alberto Sololuze pero, "desgraciadamente, un año después, Joaquín Beltrán aún sigue desaparecido". "Desde el principio hemos exigido encontrar a los trabajadores, pero esto no es suficiente", ha añadido.
LAB "ha denunciado la gestión del vertedero en el momento del desprendimiento,pero también antes y después de la catástrofe". Pone de manifiesto la mala gestión de la empresa encargada de la escombrera, pero también la actuación del Ejecutivo autonómico. "En la actividad de Verter Recycling, además de la falta de control y de multas, ha habido acumulación ilegal de amianto a lo largo de los años, que debían ser controladas caso por caso", ha asegurado, para añadir que el Gobierno y el Departamento de Medio Ambiente "tampoco hicieron nada entonces". LAB pone nombre y apellidos a los culpables: "Iñigo Urkullu y el viceconsejero Iñaki Arriola son responsables directos de lo ocurrido en Zaldibar".
SE BUSCAN RESPONSABLES
La oposición lleva un año pidiendo explicaciones al lehendakari, Iñigo Urkullu, sobre la gestión que su Gobierno ha llevado a cabo en el basurero. El jeltzale se volvió a enfrentar ayer a las críticas sobre este asunto durante la celebración de la celebración del pleno de control en el Parlamento Vasco. Ejecutivo autonómico volvió a insistir en el "rigor" de la gestión y aseguró que su equipo seguirá trabajando "sin descanso" para localizar el cuerpo de Joaquín Beltrán, que aún no ha podido ser localizado.
EH Bildu fue una de las formaciones más críticas con el lehendakari. El parlamentario abertzale, Mikel Otero, denunciaba que, pese al tiempo transcurrido desde la catástrofe, aún es necesario "aclarar casi todo" y subrayaba que, al margen de las posibles responsabilidades penales de la empresa, para que se produzca un desastre de estas dimensiones tiene que haberse producido algún "fallo" en los sistemas públicos "de control", por lo que exigía que "se asumieran responsabilidad" y que se adoptaran medidas para mejorar el sistema que regula estas instalaciones.
Sin embargo, la gestión de la escombrera no sólo se quedaba en la Cámara de Vitoria, también era protagonista en la Comisión Europea, donde el eurodiputado del Partido Popular, Javier Zarzalejos, pedía que se informara sobre si el Gobierno Vasco "ya ha dado explicaciones sobre el incumplimiento de normas comunitarias" y le ha instado a que explique sus conclusiones tras "los contactos anunciados" y qué medidas va a adoptar sobre este caso.
CIERRE DEFINITIVO
Una de las preguntas que todavía no tiene respuesta es la de si la escombrera será cerrada definitivamente tras la localización del cuerpo de Joaquín Beltrán. De momento, contúan activos los trabajos de estabilización del vertedero pero todo apunta a que una vez alcanzado el objetivo, la escombrera echará el cerrojo para siempre. Los daños han sido suficientes pero la consejera no se atreve a confirmarlo todavía. "Todo tendrá que ir por fases", señalaba la consejera vasca, Arantxa Tapia.