Así te hemos contado en COPE Euskadi la tractorada a su paso por Bilbao: "La realidad es muy mala"

Los agricultores y ganaderos vizcaínos se han hecho notar por las calles de Bilbao con protestas que han arrancado a primera hora de la mañana desde Carranza, Gernika, Markina, Duranguesado, Mungia y Erandio. Tras su paso por la explanada de San Mamés, las columnas de tractores han continuado hasta El Arenal, donde se ha improvisado un mercado trasparente en el que se ha vendido cordero envasado a veinte euros.

Y es que la imagen de este mediodía ha sido la de una capital abarrotada de cerca de un centenar de vehículos en los que el primer sector ha alzado la voz a base de pitidos y pancartas. Sin embargo, el seguimiento ha sido inferior al de Álava, ya que la realidad es que el peso del sector en Bizkaia es bastante menor. Las explotaciones son más pequeñas y cada vez más escasas. Aun así, han salido a la calle para que se les escuche y han entonado el ahogo que vive el sector primario.

Una protesta en la que se reclamaba el fin de los tratados europeos de libre comercio y "precios justos" para los baserritarras. Entre los carteles, leemos algunas de sus reivindicaciones como por ejemplo: "Nuestro fin será vuestra hambre", "sin campo no hay vida" o "el campo necesita más mujeres y menos políticos.

"La realidad es muy mala"

En COPE Euskadi, este mediodía nos hemos subido al tractor del ganadero de Mallabia y Presidente de la raza pirenaica de Bizkaia, Juan Luis Irazola, dedicado a la carne de vacuno aunque compagina su trabajo como ganadero con el transporte de ganado.

Durante el recorrido, Juan Luis nos ha contado "lo duro" que está siendo sacar adelante a sus cincuenta cabezas de ganado. De sus cinco hermanos, ha sido el único en continuar con el negocio. Se levanta a las siete de la mañana, no libra ningún día y, aun así, no es suficiente. Y es que pone el foco en el sacrificio que supone trabajar en el campo. Nos cuenta que necesita compaginar su labor como ganadero con el transporte de ganado para que le salgan las cuentas. "Es muy difícil vivir del sector", asegura.

El ganadero insiste en que las ayudas por parte de las Instituciones no son suficientes. Reclama, como el resto del sector, precios más justos y menos burocracia en las gestiones de negocio. Además, no ha querido dejar pasar el problema del relevo generacional que preocupa a todo el colectivo. Dice que es difcil vivir del campo con las inversiones son millonarias que requiere. "El sector jóven quiere empezar, pero se muy difícil porque son unas inversiones millonarias".