El Miserere marrajo: un canto de perdón en un mundo que necesita cambiar
Esta tarde realizarán la tercera jornada del triduo y mañana desarrollarán el acto más especial de la Cuaresma

Acto del Miserere, en una antigua edición
Murcia - Publicado el - Actualizado
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La semana está siendo intensa para la Cofradía marraja. Tras el Vía Crucis del lunes, se está desarrollando el Triduo en honor al Nazareno. Hoy tendrá lugar la tercera sesión y mañana tendrá lugar el gran acto litúrgico de la cuaresma para ellos.
Fernando Gutiérrez Reche, capellán de la cofradía, ha explicado precisamente en qué consiste la cita de esta tarde. "Hoy se va a hablar de la carta de cuaresma que ha escrito el Papa Francisco. Cada año en cuaresma escribe una carta a todos los cristianos y en este año, pues la carta es una invitación a peregrinar, a peregrinar hacia Jerusalén, hacia la paz, pero caminar como hermanos, caminar como comunidad, caminar como personas que construyen relaciones de amistad, de amor, de fraternidad, justamente lo contrario de lo que estamos viendo en esta situación tan crispada".
Retransmiten este y todos los actos para todos aquellos que no pueden acudir y para quienes viven lejos de Cartagena y tienen ganas de participar en los actos de cuaresma y posteriormente estarán pendientes de las procesiones.
el acto más destacado
Además del Triduo, tendrán la eucaristía de la cofradía el domingo, o la vigilia de juventud el próximo sábado, pero sin duda, el Miserere es el que acapara la atención para la jornada de este viernes.
"Pues el Miserere es un canto penitencial que el rey David hizo ante un pecado que este rey cometió. Sintió dolor de ese pecado, y entonces pues hizo un salmo, un salmo. El Miserere, es un canto, un canto de perdón, un canto de arrepentimiento y de pedirle al Señor que lo perdone y que le dé un corazón, un corazón nuevo. Entonces, pues ese canto se canta de una manera solemne, acompañado de música del órgano. Es una invitación a arrepentirnos de las cosas que hacemos mal en la vida, en un mundo como el nuestro, como está tan mal, pues arrepentirnos y que las cosas vayan cambiando entre todos".
Es un acto muy singular y especial para ellos. "La verdad es que todo lo que lleva en torno al acto es muy bonito, porque la entrada con el coro de peregrinos de Tannhauser, pues al final la marcha de nuestro Padre Jesús...es una celebración pues muy) bonita, muy bonita y muy sentida y vivida por los marrajos, por todos los procesionistas y por multitud de fieles que siguen esta celebración en el Templo de Santo Domingo".