El final del “marianismo”: El PP estrena modelo de Primarias
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En cinco días Rajoy pasó del todo a nada. El 5 de junio, solo cuatro días después de que perdiera La Moncloa, el líder más longevo del PP, con catorce años al frente, anunciaba entre lágrimas que abandonaba la presidencia del partido. Los populares afrontaban así la elección de un nuevo líder con un sistema de doble vuelta, con unas primarias abiertas y posteriormente los dos candidatos más votados se someterían a la votación de los compromisarios en un Congreso extraordinario. Por primera vez, no se aplicaría el modelo del dedazo.
Rajoy ponía así fin a 37 años de trayectoria en el partido, donde lo ha sido prácticamente todo, en buena medida gracias a su resistencia: llegó al Gobierno en medio de la peor crisis económica de la historia reciente de España tras dos derrotas electorales, hizo frente a la corrupción y a sus críticos, que estuvieron a punto de llevárselo por delante en 2008, en las semanas previas al Congreso de Valencia, cuando Esperanza Aguirre especuló con presentarse.
El PP afrontaba así un proceso desconocido para ellos. Las dos figuras más representativas del partido junto a Rajoy en la última década, su Vicepresidenta del Gobierno en las dos Legislaturas, Soraya Sáenz de Santamaría y la Secretaria General de los populares, María Dolores de Cospedal, decidieron dar el paso después de que el candidato favorito por las bases, Núñez Feijóo, diese un paso atrás para centrarse en la presidencia de la Xunta de Galicia.
Finalmente fueron seis candidatos los que buscarían gestionar Génova y liderar la Oposición a Pedro Sánchez. Entre las dos favoritas se coló el vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado, que quedaría segundo en el proceso de primarias, solo por detrás de Sáenz de Santamaría, que resultaría vencedora de la primera parte del proceso.
Cospedal ocuparía un discreto tercer puesto, pero su consabida enemistad con Santamaría facilitaría la victoria de Casado en el Congreso, al facilitarle el apoyo de sus compromisarios. De esta manera, la propuesta de Sáenz de Santamaría de una candidatura única con Casado, no salió adelante.