El centenario de una institución dedicada al diálogo entre la Iglesia y las artes
La Escuela del Beato Angélico de Milán cumple 100 años
Madrid - Publicado el
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La Escuela del Beato Angélico fue fundada en Milán hace 100 años con el compromiso de irradiar la fe cristiana a través de las artes. Su fundador fue el sacerdote Giuseppe Polvara, pintor y arquitecto, que buscaba crear una comunidad de artistas formados en la excelencia técnica y espiritual. En esta escuela se cuidan especialmente unas sólidas raíces culturales y se combina el trabajo de taller y la oración litúrgica, siguiendo el lema benedictino de Ora et Labora.
Corría el año 1921 y Giuseppe Polvara tenía en mente reiniciar un diálogo serio entre la Iglesia y las artes, de modo que reunió a los mejores artistas de Italia y, como un pionero, comenzó a formarlos. El actual director del centro retoma aquella intuición: “como Iglesia sentimos la necesidad de reanudar el diálogo, anhelado por los últimos pontífices, con el arte y la sociedad contemporánea".
A lo largo de estos cien años ha sido una combinar las raíces históricas con una fuerte apertura hacia la modernidad y la comunicación, convirtiéndose en un centro de difusión cultural de referencia. De hecho, la escuela fue protagonista del movimiento litúrgico y quiere continuar el diálogo en favor del arte cristiano. Ha estado presente en la construcción y renovación de muchas iglesias con mosaicos, pinturas, ornamentos, mobiliario y vidrieras, tanto en Italia como en otros países.
Ahora el desafío se centra en la dimensión pastoral de los bienes culturales y en la capacidad de entrar en el lenguaje contemporáneo con una nueva apertura a la cultura audiovisual. El gran reto actual no es tanto teórico sino de producción, de diálogo efectivo, de hacerse presente en el ámbito del arte contemporáneo y de la arquitectura de lo sagrado. Con el patronazgo del gran beato Fray Angélico, los responsables de esta escuela piensan que el arte cristiano, y el arte como tal, plantean una cuestión profunda y decisiva para el camino de la Iglesia en el tiempo presente.