La Iglesia católica de Oriente Medio consagrará la región el próximo 27 de junio a la Sagrada Familia
Se pedirá a la Sagrada Familia ayuda para salir de las condiciones asfixiantes que vive la región
Madrid - Publicado el
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El acto se realizará en el marco de una Eucaristía que se celebrará en cada uno de los países que conforman el Consejo de los Patriarcas Católicos. El patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, ha explicado en una carta que el evento central será una Eucaristía en la basílica de la Anunciación de Nazaret, en la que participarán todos los obispos de Tierra Santa.
En la oración que se ha preparado para este acto se pedirá a la Sagrada Familia ayuda para salir de las condiciones asfixiantes que vive la región y lograr el retorno de la paz y la estabilidad. También se clamará para que todos los ciudadanos de Oriente Medio puedan vivir en igualdad de derechos y deberes, y disfrutar de una vida libre y digna, independientemente de sus creencias religiosas o procedencia. “Recurrimos a tu protección, oh Familia de Nazaret, que viviste las penurias con fe, esperanza y amor, para dedicarte por completo nuestro Oriente y nuestros países, y confiarte nuestras vidas y nuestras patrias, nuestros miedos y esperanzas, nuestros hijos, nuestra juventud y nuestras familias, para que cada familia se convierta en una Iglesia doméstica y una escuela de santidad”.
Durante el acto de consagración será bendecido un icono de la Sagrada Familia pintado con incrustaciones de reliquias de la misma basílica, que irá en peregrinación, partiendo del Líbano, por los países de la región hasta su llegada a Roma el 8 de diciembre de 2021, cuando se clausurará el Año de San José. Desde Roma, regresará Tierra Santa, donde se quedará permanentemente.
El Patriarca Pizzaballa ha invitado a todos los cristianos a participar, ya sea de manera presencial o desde su parroquia o convento de origen, para implorar la misericordia de Dios y su paz en nuestro amado Oriente Medio, donde la fe cristiana nace y sigue viva, a pesar de los sufrimientos, y anuncia que el Papa Francisco se sumará con la bendición apostólica desde Roma.