El desgarrador testimonio de un policía de Valencia en la A-3 por la DANA: "Veía cómo el agua arrastraba a otros coches"

La DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que ha golpeado a la Comunidad Valenciana ha dejado a su paso un rastro de desolación y angustia. En una conmovedora entrevista en El Partidazo de COPE, el policía Sergio compartió su desgarrador testimonio desde la A-3, donde quedó atrapado junto a otros vehículos debido a las intensas lluvias y el desbordamiento del agua.

Sergio relató su experiencia desde un tramo de la autovía, cerca del circuito de Cheste, en un momento en que el caos se apoderaba de la carretera. “Me dispondré a pasar la noche en el vehículo”, comenzó, describiendo la incomodidad y el miedo que sentía mientras se encontraba descalzo, con los pies empapados.

Las condiciones eran críticas y el nivel del agua había crecido a un ritmo alarmante, lo que complicaba aún más la situación. “Vi cómo el agua arrastraba a otros coches”, dijo con un tono de desesperación que resonaba en cada palabra. La intensidad de la tormenta había hecho que el agua comenzara a desbordarse en el barranco, creando un panorama aterrador.

Sergio relató que, en un momento, los coches empezaron a pasar a su lado, y decidió que era necesario abandonar su vehículo y buscar un lugar más seguro. “El coche se queda aquí y yo tengo que irme”, reflexionó en un momento de pura adrenalina y sentido de supervivencia.

Un policía de Valencia en la A-3

El nivel del agua había bajado, pero el daño ya estaba hecho. Sergio describió escenas desgarradoras: “Da pánico ver el estado de los vehículos”. Mientras él permanecía en su auto, los bomberos, equipados con arneses y cuerdas, se adentraban en el agua para rescatar a personas que aún podían estar atrapadas en sus coches. “Desde mi vehículo veía cómo iban poniendo el agua y había gente dentro”, recordó, la angustia palpable en su voz.

A pesar de ser un agente de policía, Sergio no podía hacer más que observar y esperar. “No sé el estado de ellos, pero sí que se pudo ver que lograron sacar a la gente de esa zona”, dijo, reflejando su frustración ante la incapacidad de ayudar más directamente en ese momento crítico. La incertidumbre pesaba sobre él y sus compañeros, quienes tenían que permanecer en alerta a medida que la tormenta continuaba.

La activación del plan de emergencia por parte de la jefatura había llegado justo a tiempo. Sergio explicó que habían estado escuchando la radio y que, a medida que la situación se agravaba, la orden de despejar el barranco y retirar vehículos se hizo urgente. “A las 17:00 de la tarde, el barranco llevaba como tres o cuatro metros ya de agua”, informó, enfatizando la rapidez con la que la situación había cambiado.

El testimonio de Sergio es un reflejo del coraje y la dedicación de los cuerpos de seguridad en momentos de crisis. A pesar de estar atrapado y en una situación precaria, su enfoque seguía en la seguridad de los demás. La llamada a la calma al final de la entrevista resuena con fuerza: “Esperemos que lo que llueva sea leve en comparación con lo que ha caído y no tengamos que volver a movernos allí”.

"Veía cómo el agua arrastraba a otros coches"

Este relato no solo ilustra la desoladora realidad de quienes enfrentan desastres naturales, sino que también resalta el espíritu de servicio y sacrificio que caracteriza a muchos agentes en situaciones extremas. Sergio, como tantos otros, representa la lucha diaria de los que están en la primera línea durante las emergencias, enfrentándose a lo inesperado con valentía y determinación.

Mientras la tormenta continúa su curso, la comunidad de Valencia se aferra a la esperanza de que el esfuerzo colectivo y la resiliencia prevalezcan, y que testimonios como el de Sergio sirvan para recordar la importancia de la preparación y la solidaridad en tiempos de crisis.