Investigadores del Kings' College descubren un método para que un fármaco que ya existía acabe con los ataques de asma
El doctor Gregorio Soto, neumólogo, explica a Cristina cómo funciona el nuevo sistema que puede frenar que se agudicen los casos de asma en el futuro e impedir hospitalizaciones
Madrid - Publicado el - Actualizado
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En España hay más de dos millones de personas que sufren asma y otras dos millones padecen de EPOC, una enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Ambas enfermedades cuestan 5.000 millones de euros al sistema nacional de salud y, pese a la magnitud y a la gente afectada, el tratamiento apenas ha mejorado en 50 años. No obstante, señala Cristina López Schlichting en Fin de Semana, “parece que ahora la cosa está a punto punto cambiar”.
No es que haya un nuevo fármaco, apunta la comunicadora, sino que puede haber una nueva forma de utilizarlo y que ha elaborado un estudio de científicos del King's College de Londres. Gregorio Soto, responsable del área de asma en la Sociedad Española de Neumología, explica en Fin de Semana que “el asma se considera una enfermedad inflamatoria”. “Es una reacción, digamos, autoinmune del propio sistema contra el tejido bronquial”.
El nuevo sistema del King's College
Señala el doctor Soto que cada vez se sabe mucho más sobre estas enfermedades y que “hay muchos fenotipos de asma”. Este estudio, que se llama ABRA, ha sido publicado en The Lancet y realizado por el hospital Saint Thomas de Londres y el King's College, lo que indicae es “que está utilizando un anticuerpo monoclonal, anti-IL5, en este caso, podríamos evitar en los pacientes que vayan a urgencias por agudización, pues agudizaciones futuras”.
Aclara el neumólogo en Fin de Semana que se trata de “anticuerpos humanizados, en algunos casos totalmente humanos, que se pueden utilizar con garantías de seguridad, sin efectos secundarios en pacientes con asmas”. En cualquier caso, el doctor asegura a Cristina que es fundamentales que los pacientes de asma sigan un tratamiento constante, aunque estacionalmente bajen los síntomas.
“Tú puedes alternar con síntomas con periodos en los que te encuentras bien, y realmente el seguimiento de la medicación inhalada, a veces es deficitiario, no se adaptan a los regímenes terapéuticos porque no lo ven necesario los pacientes”, denuncia el doctor que, explica, “esto condiciona que tu árbol bronquial está en mala situación para abordar una situación estresante como la exposición a un alérgeno”.
Los dos factores de riesgo para el asma
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que hay que más de 260 millones de personas con asma en el mundo. La situación, como explica la directora de Fin de Semana, que reconocer sufrir ella también la enfermedad, está empeorando. Pero ¿hay algún elemento relacionado con la evolución química de los cultivos, con la contaminación que pueda incidir en el asma o en el EPOC?
El doctor Soto señala que, en el caso del EPOC “fundamentalmente el factor de riesgo es el tabaco”. No obstante, en lo que se refiere al asma, “sí que se ha duplicado la prevalencia de esta enfermedad en los países occidentales y, fundamentalmente, se atribuyen a estos factores de contaminación, incluso de cambio de microbiota por deficiente alimentación y susceptibilidad genética”.