"Hoy era la Crida, la llamada que inicia la fiesta de las fallas en Valencia, y está suspendida por el luto. Identificados los fallecidos en el incendio de Campanar, los vecinos han dedicado el fin de semana a comprarse cepillos de dientes, ropa interior, algún jersey o conseguir los medicamentos que necesitan y el acceso a las cuentas cuyas tarjetas se han quemado.
Los bomberos se la jugaron más allá del límite. Salvaron ancianos, un tetrapléjico, mujeres y niños. Un grupo quedó rodeado por el fuego, entre dos plantas, y llegó a despedirse de sus compañeros por emisora. Sólo les quedó la opción de derribar una puerta y descolgarse desde uno de los pisos. Uno de ellos se lanzó sobre la colchoneta desplegada en la acera por sus compañeros.
¿Qué elemento se añadió, qué mezcla actuó de combustible acelerador?
Otro se empeñó en llegar hasta tres veces a la octava planta porque sabía perfectamente que había una familia entera, Marta y su marido, el niño de dos años y el bebé, encerrados en un baño esperando a ser salvados. Lo sabía porque llamaban ellos mismos al 112 explicando el horror que estaban viviendo. El bombero apenas podía ver y ni el traje ignífugo le impedía quemarse debido a las altas temperaturas. Buscaba el apartamento que indicaba el 112, pero los números se habían derretido. Lo intentó hasta que sus jefes lo obligaron a salir de aquel infierno. El hombre ha comentado que el jueves fue el peor día de su vida. Muchos de los bomberos están recibiendo ayuda psicológica en estos momentos.
Hay quien ha querido arremeter contra ellos y sus órdenes de permanecer en las casas, pero lo que ocurrió fue sencillamente que el protocolo fue superado por una fachada que ardió como la yesca.
La calle está cubierta de chapas de aluminio y bolas de lana de roca. Algunas las recogimos ayer y podéis verlas en cope. es ¿Qué elemento se añadió, qué mezcla actuó de combustible acelerador? José Javier Ibáñez, arquitecto técnico de la Asociación de peritos de seguros y comisarios de averías.
El escándalo Koldo-Ábalos
Un siniestro azar ha apartado nuestra atención de la actualidad política, porque Pedro Sánchez, después de afrontar una humillante derrota el anterior fin de semana en Galicia y poner a su partido en un lamentable tercer puesto con nueve escaños, recibía esta semana el varapalo del escándalo Koldo-Ábalos, la noticia de que un equipo de personas del entorno del entonces ministro de Fomento se había embolsado 54 millones de euros a costa de sobrevalorar y vender mascarillas en plena crisis del COVID.
Ayer comenzó a reavivarse el run run del escándalo y Sánchez, acorralado, habló con motivo de la reunión de la Internacional Socialista en Ferraz.
En la Sexta, sin embargo, el exministro Ábalos le echaba morro. El problema ya no es que Ábalos se aferre a la poltrona de diputado, es que están comprometidos desde la actual presidenta del Congreso, Francina Armengol, que dirigía en aquellos momentos el Gobierno de Baleares y contactó con Koldo, al entonces ministro de Sanidad, Salvador Illa, y hasta el hoy ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que dirigía entonces el Gobierno de Canarias y también compró. Es una podredumbre general que deja gravemente tocado a todo el Gobierno de Sánchez. Huele a podrido en Moncloa.
Los hombres y mujeres recios del campo
No quisiera cerrar el capítulo de la actualidad sin anunciar las movilizaciones de agricultores esta próxima semana. Hay reunión de ministros europeos y COAG, UPA y ASAJA tienen prevista una tractorada mañana frente a la sede de la Comisión Europea en Madrid. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos tienen además convocadas cuatro manifestaciones para los próximos días.
Son hombres y mujeres recios, que se levantan al alba y se agrietan las manos, que arrostran los fríos más inclementes y los calores españoles más extremos. Si los franceses se han echado a las calles por lo suyo, bien podemos nosotros respaldar a quienes nos dan de comer.
Y, antes de abordar el evento técnico de la semana, no en España, sino en el mundo, el Mobile Congres de Barcelona, me gustaría dar un breve espacio al capítulo internacional.
Navalni, por fin descansa en paz
La semana pasada recordarás que fue asesinado Alekséi Navalni, uno de los hombres que se ha atrevido a hacerle frente al tirano Putin en Rusia. Lo envenenaron en 2020 y se salvó en Alemania. Cuando regresó a su tierra a seguir luchando, lo mandaron a un campo de trabajo en el Ártico. Allí murió después de una larga caminata. Cuando la madre fue a buscar el cadáver de su hijo, se lo negaron. Adujeron que había que hacer la autopsia y este viernes tuvieron la poca vergüenza de decirle a la mujer que lo enterrarían en el terreno de la cárcel si en tres horas no firmaba llevarlo a una tumba en secreto y evitar procesiones públicas de sus numerosos seguidores.
Ha sido tal el escándalo y la indignación que los popes de la Iglesia Ortodoxa han presionado a las autoridades rusas. Por fin, el cuerpo ha sido entregado a la madre y a la viuda y las exequias se celebrarán normalmente en su tierra. Qué dolor, los tiranos que persiguen a sus víctimas hasta la tumba"