Cristina L. Schlichting: "En Francia hay un serio problema de orden público"

Es dos de julio y es operación salida, con cuatro millones y medio de desplazamientos. Hace calor, ma non troppo. La semana acaba con alguna tormenta y temperaturas al alza, sobre todo en el sur. Así pinta el mes de julio según nuestro hombre del tiempo, Jorge Olcina.

Francia tiene muy serios problemas. Nuestro vecino ha vivido otra noche de disturbios, la quinta desde la muerte de un joven de origen marroquí y argelino al que un policía disparó en Nanterre, al oeste del país, cuando se daba a la fuga en un control policial. Ayer se celebró el multitudinario entierro de Nahel y el presidente de Francia, Enmanuel Macron, tuvo que suspender una visita de estado a Alemania para seguir de cerca la grave situación. El saldo de anoche: 719 detenidos. Hay 577 coches quemados, tiendas vandalizadas, 74 edificios incendiados y 871 incendios en la vía pública y 45.000 agentes que se enfrentan a multitudes armadas con cócteles molotov, piedras y armas blancas. La situación es muy grave en una nación que ha ido acumulando inmigrantes sin integrar en grandes suburbios alrededor de las ciudades y donde las manifestaciones de chalecos amarillos han marcado la pauta de los desórdenes callejeros. En Francia hay un serio problema de orden público. Desde los atentados islamistas se permitió a la policía un uso mas laxo de las armas y ahora parece que las disposiciones en esa dirección han tenido malas consecuencias. Se debate si restringir las disposiciones antiterroristas, pero entretanto las calles han sido tomadas, en especial por jóvenes muy disgustados con el sistema.

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Escucha aquí el editorial completo de Cristina L. Schlichting de Fin de Semana del domingo 2 de julio

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Ayer comenzó la presidencia española de la Unión Europea, miel sobre hojuelas para Pedro Sánchez, que puede utilizar sus atribuciones para la campaña electoral. Su primer gesto ha sido asegurar que los aliados europeos apoyarán sin desmayo a Ucrania. No es mala noticia para Volodimir Zelenski que el viernes comentaba a nuestro compañero Ángel Expósito el río de sangre que está costando la guerra.

A 21 días de las elecciones en España las encuestas acaparan la atención. El PP mantiene su ventaja y, según la encuesta de ayer de Sigma Dos para El Mundo, ganaría las elecciones con entre 140 y 143 diputados. El PSOE iría detrás y los sondeos no se ponen de acuerdo sobre el tercero en liza. Mientras Sigma Dos da ese puesto a Vox, Gad 3 registra a Sumar como tercero y a Vox en cuarto puesto. Ayer estuvo en Fin de Semana el presidente de Gad 3, Narciso Michavila, que cifraba el resultado de los populares en una horquilla entre 150 y 160 escaños. La mayoría del parlamento está en 175.

El sorprendente titular que nos dejaba ayer Michavila es que la participación se dispara y será superior a la de las anteriores elecciones generales, un 70%.

Quizá es cierto. Hace calor y es insensato convocar a las urnas un 23 de julio; pues basta que nos lo pongan difícil para que digamos, “te vas a enterar”.

Y si la semana ha venido marcada en campaña por las ofertas económicas de Pedro Sánchez, hoy Yolanda Díaz se despacha en entrevista en El Mundo prometiendo 20.000 euros a cada joven que cumpla los 18 años. Es tan burda la evidencia de que se intenta directamente comprar el voto de los que acuden por primera vez a las urnas que da vergüenza ajena.

Desde Lérida, Alberto Núñez Feijóo anunció una batería de propuestas encabezadas por la equidistancia entre el centralismo y el rupturismo. “Aquí somos todos iguales -dijo- y los que quieren comer solos es que quieren comer más. No cuenten conmigo para romper la unidad del Estado”.

Feijóo hizo varias propuestas importantes para el campo. Un Pacto Nacional del Agua, ayuda para la compra de vivienda en el medio rural y ventajas para las empresas que quieran invertir.

Repitió que derogará la reforma del Código Penal, que borró el delito de sedición y rebajó las penas por malversación; que cambiará la Ley Trans y la de Memoria Histórica.

El dirigente del PP criticó los señalamientos que el actual Gobierno ha hecho de empresarios, periodistas y jueces. También ha entrado en el polémico asunto de la vivienda advirtiendo de que “los partidos que apoyan al gobierno proponen la expropiación de vivienda y eso es lo contrario de la seguridad jurídica y la atracción de inversiones”.