El homenaje del hijo de Michael Robinson a su padre en "Grupo Risa"

Queríamos que corriera el tiempo, encontrar el momento oportuno. Y ese momento por fin ha llegado. Hoy entrevistamos a Liam Robinson, el hijo de Michael. Casi siete meses después del adiós de su padre.

Tratándose de nosotros, como entenderéis, ha sido inevitable que esta charla, que recordaremos por mucho tiempo, haya tenido momentos de risas, pero también los ha habido entrañables y emotivos. Hoy descubriréis a un crack; a Liam. Os daréis cuenta de que no tiene el mismo castellano que su padre, pero sí su mismo magnetismo; por cómo se explica, por cómo ve la vida, por su optimismo, por su franqueza; en definitiva, por su forma de ser.

La emisión, hace unas semanas, del último Informe Robinson, titulado “Good, better, best”, que tuvo a su padre como protagonista y que supuso el broche de oro a un magnífico programa de la televisión, generó un aplauso unánime, un abrazo general, una emoción compartida y un reconocimiento solemne a aquél inglés que un día vino a España para quedarse y que se ha convertido posiblemente en el inglés más querido en la historia de nuestro país. En esta atmósfera quisimos que llegara esta entrevista a Liam, que nos concedió amablemente.

En este último Informe Robinson, muchos nos hemos sorprendido con matices de la vida de Michael que desconocíamos, incluso su propio hijo, cuenta qué le llamó la atención. Liam nos descubre, con la sonrisa puesta, detalles del lado profesional y del lado más personal de Michael.

En lo personal, cómo era en casa, con la familia, qué enseñanzas le dio, qué consejos; en su adolescencia, las broncas que recibió de él, o la reacción posterior del boss a esas salidas nocturnas con los colegas sin que, en principio, se enterara… Y en lo profesional, aspectos como, por ejemplo, aquel momento, hace años, cuando alguien decidió que terminara El Día Después. ¿Cómo vivió Michael esa etapa hasta la llegada de Informe Robinson?

Aderezado con buena música, con nuestros personajes, con testimonios de Michael, y con mucho más, hoy, a través de su hijo, rendimos homenaje a Michael Robinson, un tipo que no tuvo el título de Sir, pero que simbólicamente lo tiene y lo tendrá en nuestros corazones.

Puede que nos halla dejado. Pero nos queda su legado. Y este siempre estará con nosotros; como su recuerdo imborrable. En esta entrevista nos hemos reído, nos hemos emocionado, hemos recordado, y hemos hecho un nuevo amigo. Cuando todo pase, Liam, caerán ese par de gintonics. Promise.