Luis del Val: “A Sánchez le queda nombrar un director general de Loterías que premie los números que le diga”
Habla el profesor del control del Gobierno sobre las instituciones del Estado
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Luis del Val pone el foco de la imagen del día de "Herrera en COPE" en las ‘conquistas’ que está haciendo el Gobierno con las instituciones del Estado:
En tiempos de la Dictadura que viví, se comentaba que Franco podía hacer lo que quisiera, pero no podía señalar cuál iba a ser el primer premio de la Lotería Nacional. Bueno, pues igual Pedro Sánchez se inventa un decreto por el cual uno de sus monaguillos sustituya los bombos y el azar por alguien que diga cuáles son los números premiados. Le ha restado credibilidad a la Fiscalía General del Estado, a la Abogacía de Estado, intenta dar un empujón al Poder Judicial, ha convertido el crédito de las encuestas del CIS en poemas de amor adolescente de Tezanos hacia su amo; le ha cortado la cabeza al Centro de Inteligencia y la ha sustituido por una persona afín… La penúltima cacicada va a ser, tras despachar al director del Instituto Nacional de Estadística, poner un Tezanos de guardia para que las estadísticas digan lo quiere que diga la ministra de Economía, o sea, Sánchez. Creo que sólo le quedan ya tres objetivos: sustituir al presidente del Banco de España por no darle la razón, y nombrar un director general de loterías que premie los números que le diga Pedro I, el Mentiroso. Ni Franco fue capaz de dar ese paso.
Y todo eso con los poderes económicos en contra, con los medios comunicación criticándole, y no sé yo si una conspiración masónica que, por humildad, no ha querido confesar. No quiero imaginar de lo que sería este hombre capaz, si todos los medios se dedicaran a reconocer su inteligencia, su bondad, su sacrificio por el país y tantas otras virtudes que ha desgranado Tezanos en la hagiografía que ha escrito sobre San Pedro Sánchez, El Economista.
Todavía no ha podido con la dignidad de la Policía, a cuyos componentes denomina piolines -en sus diálogos íntimos con los golpistas catalanes- ni con la de la Guardia Civil, a pesar de los denodados esfuerzos del pequeño Marlaska por someter coroneles, pero queda todavía mucha legislatura. No hay que desanimarse. Incluso ha logrado domar a la boquirrota ministra de Igualdad.