Invitan a una niña a un cumpleaños después de un año sin verla y la reacción de los compañeros se hace viral

El vídeo lo compartió en redes el padre de la pequeña de 12 años. Acumula miles de 'me gusta' y decenas de comentarios

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 08:13

Es una escena que, afortunadamente, se repite muchas veces. Niños jugando. Quizá sea de los mejores sonidos que uno pueda recibir así, de buena mañana. Pocas cosas transmiten tanta alegría como unos niños pasándolo bien.

Hasta ahí, todo normal. Lo que esperamos que les pase a los chiquillos en un día cualquiera, sin necesidad de que sea especial. Lo que ocurre es que esta escena tiene una historia detrás. Bernardo Jordano tiene una hija llamada Merceditas. Bernardo es de Córdoba y es Vicepresidente de una Fundación que se llama, ojo, "Miaoquehago" en honor a su segunda hija y su media lengua.

Invitan a una niña a un cumpleaños después de un año y la reacción de los compañeros se hace viral

Su hija mayor, Merceditas, a la que le sientan las gafas divinamente, padece una enfermedad rara. Trisomía Parcial de Cromosoma 3. Ahora tiene 12 años y nadie daba un duro por ella, pero entre su mujer y Bernardo, pues se han ido apañando para sacarla adelante y ahora, lo del “problema” lo miran con otros ojos.


En esa escena de alegría, Merceditas está tumbada sobre un castillo hinchable y, alrededor, otros niños saltan para que parezca que va en un barco, que el mar se mueve, que llegan las olas. Es un cumpleaños. Los niños del anterior cole de Merceditas la invitaron a una fiesta y eso que llevaban un año sin verse. Esos críos no la dejaron sola ni un ratito. Y entre todos, se lo pasaron en grande. Esos críos iban con Merceditas a la misma clase de inclusión.

"Los padres (todos) con la lagrimilla y aprendiendo de la experiencia. Más de esto, por favor. Inclusión de la buena", escribió el padre de la pequeña en el post de X.






Inclusión de la buena, de la de verdad. Estos buenos días de hoy van para todos esos niños a los que no se les invita nunca a cumpleaños. La risa de Merceditas, con sus gafas, su coleta, su pasador con una flor y su alegría, nos dice que todavía hay esperanza.