Un joven de Barcelona estudia Medicina y la decisión que toma al empezar a trabajar en el hospital cambia la vida de sus pacientes: "Se agradece"
Joan Valls se ha hecho popular en redes sociales por la particular forma que tiene de ayudar y hacer más amena la estancia en el hospital a los pacientes
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Si ha entrado usted alguna vez a un quirófano, ya sabe el frío que hace. Entre el frescor, la bata esa ridícula que te ponen, el miedito, los médicos de verde, los nervios, todo es un trago. Ahora bien, imagine que entra en un quirófano y suena un violín. Y suena muy bien.
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Joan Valls es residente de pediatría y además es músico y tocó su violín en un quirófano en el Hospital San Joan de Déu en Barcelona. Un niño estaba a punto de ser operado y Joan quiso tocar y acompañar el momento. Justo antes de que el crío fuera anestesiado, ahí estaba el violín de Joan, haciendo que la situación fuera más amable.
Pero eso no fue todo. También vestido de verde estaba el padre del niño, que no lo dejó ni un momento. Y ese es el protocolo del Hospital San Joan de Déu de Barcelona.
Así que estaría muy bien que fuera contagioso. Que los padres puedan acompañar a los niños en una operación o en una prueba. Pídanlo en Atención al Paciente. Es un derecho. Tienen el poder de hacerlo más fácil porque hay que cuidar más a quien lo está pasando mal.
Y todo esto, si Vd ha tenido que entrar en un quirófano, ya sabe que se agradece muchísimo…
Una niña andaluza abre los regalos de los Reyes Magos y se queda con esta cara al ver la reacción de sus padres
Ha sido otra de las Historias del Día que ha traído recientemente María José Navarro.
Ustedes se acuerdan de que el lunes llegaron los Reyes, ¿no? Lo digo porque parece que fue hace mucho tiempo, y porque a lo mejor, sus niños ya se han cansado de los regalos de sus Majestades, que vinieron desde Oriente con toda su carga y la ilusión a los chiquillos les ha durado un respiro.
Excepto, si esos Reyes, ya se han aprovechado. A Ana le llegó una caja de la que salía una grasilla. Al principio, no se fiaba. Le daban un poco de miedo abrir aquello y quitarle el papel que lo cubría. Hasta que se dio cuenta de que era lo que más le gustaba del mundo. ¡Un chuletón!
Porque es que, oigan, hay niños que piden comida en sus cartas. Daniela tiene media lengua, pero parece que también buena boca. Había pedido chuches, chocolate… ¡Y gazpacho y jamón!
Daniela Fernández Pereira se llama este bombón a la que los Reyes le mandaron sus regalos directamente en una bolsa de supermercado. Ana y Daniela han aprovechado perfectamente ya sus Reyes y apuntan maneras de gente cabal, sensata y juiciosa.
Nada de juguetes. Chuletón, jamón y gazpacho.
A ver si vuelven Sus Majestades cada poco, ¿no?