"Hice vudú a mi vecina que no paraba de mover los muebles y le curé el lumbago"

Estas son algunas de las maldiciones que han sufrido los fósforos. Hay quien cree en las que echan maldiciones vendiendo romero, hay gente que paga a personas satánicas para que cause un mal a otra persona. Estas son algunas de los malos presagios que han sufrido los fósforos:

"Ojalá mueras como los grillos, con los cuernos metidos entre los ojos",  "ojalá que te vuelvas zombi y lo único que tengas para comer sean cerebros de políticos", "permita Dios que te salga una espinilla en el sobaco y la costrilla te sirva de muleta", "que usted tenga mucha salud y  yo una sarna, pero que a los dos nos dure muy poco"...

Hay otros fósforos que intentaron maldecir a alguien y les salió el tiro por la culata: "hice vudú a mi vecina Lola que no paraba de mover los muebles y le clavé agujas y lo que ocurrió es que le curé el lumbago y ahora hace más ruido. Ella está tan contenta que me regala bombones".

También hemos tenido que escuchar historias como la maldición que sufrió una fósfora en Granada, "no quise pagar las 500 pesetas que me pedía la gitana y me dijo, 'ojalá se te vuelvan lágrimas todas las alegrías que estás viviendo", a los pocos meses mi marido iba entre cuatro, se murió de un infarto".

¿Qué maldiciones han padecido los fósforos? Escucha aquí 'La hora de los fósforos'