"Ya conocemos las exigencias de Puigdemont para aprobar los presupuestos"

Señoras, señores, me alegro, buenos días. 

Ya es felizmente lunes, lunes 18 de noviembre, con un día marcado por la estabilidad en península y baleares, la estabilidad contra hasta un canarias que hay un temporal que va a barrer parte del archipiélago, especialmente en la Palma.

Hace mil días, mil días este miércoles, de cumplen mil días de la guerra, una guerra que se disputa a 2000 kilómetros de la frontera española. La guerra de Ucrania, cuya evolución, luego si quieren, lo hablamos de eso, la evolución próxima con la elección de Donald Trump se especula que pueda derivar en una negociación forzada, que ya veremos. Ya veremos.

Aquí, en España estamos con lo nuestro. Veinte días desde la dana que arrasó Valencia, hoy ya de lo que se habla, además de los 227 muertos, el último cadaver fue localizado ahí en Riba Roja, la reconstrucción, que los cálculos que se están haciendo del impacto económico de esta dana y lo que realmente va a ver que invertir para construir una parte que es muy importante.

Cuidado, porque el impacto económico que vale al 1% del PIB, Valencia es una de las zonas más dinámicas de España y esa zona en particular, además, especialmente significada, se va recuperando la normalidad y de esto le hablaremos en las próximas horas o a lo largo de la mañana de hoy.

Miren, hay varias cuestiones, además del rifirrafe después de la comparecencia de Carlos Mazón en el Parlamento Valenciano, ofreciendo algunas explicaciones que por muchas que ofrezca la oposición a Mazón las va a considerar absolutamente, absolutamente menores. Y el rifirrafe, entre ellas, les digo, la intención del Partido Popular en situar el foco la persona de Teresa Rivera, que es una intención que, bueno, digamos, no le está saliendo del todo mal al Partido Popular.

Al Partido Socialista, ahora le preocupa, como saben ustedes, que cuando los barros de la dana dejen de ser primera noticia, vuelva a hacerlo cada una de las novedades que hay en el caso de Begoña, de Sánchez y el caso Ábalos. Oigan, hoy hay tres informaciones en la prensa digital del caso Ábalos, que son significativas.

Una de El Debate que reproduce el email, el email, el SMS o el WhatsApp, lo que fuera, que le envió el empresario Aldama a Ábalos, amenazándole con tirar de la manta antes de entrar en prisión. En prisión sigue, tirar de la manta no ha tirado.

Otra información de The Objective, que asegura que Aldama compró siete pisos de lujo a un empresario chavista por tan solo tres millones y El Español que afirma que Aldama pagó el chalet en el que iban a esconder a Delcy durante la visita secreta.

Eso se ha descubierto porque Aldama intentó desgravarse los 3.000 euros de alquiler que costaba ese chalet en El Viso, bueno en el centro de Madrid en una zona realmente, no un chalet realmente interesante, muy bonito. Si tiene usted 3.000 euros y quiere gastárselos en pasar unos días ahí pues pues adelante.

Y hoy publican los compañeros de ABC un nuevo ejemplo de cómo la tal Cristina Álvaro es una funcionaria de la Secretaría de Presidencia que hizo gestiones de comercial pura y dura de la exposísima de la Moncloa. En este caso se trata de un WhatsApp al vicerector de la Complutense sobre el software que ahora investiga al juez Peinad, para el tema de la propiedad intelectual de la plataforma.

El destinatario del WhatsApp, Juan Carlos es Juan Carlos Doadrio, el vice rector de relaciones institucionales de la Complutense. Ya les digo, Cristina Álvaro según las fuentes consultadas por ABC, era la sombra de Begoña Gómez, no se despegaba de ella en los actos que tenían que ver con la cátedra, era la asistente de Begoña la que le llevaba la agenda.

Esta mujer también envió correos electrónicos desde el suyo personal y el de Moncloa y el de Moncloa a empresas privadas para que patrocinaran la cátedra y no dejaran de poner dinero. Eso ya me dirán ustedes si no es tráfico de influencias, desde luego uso indebido de recursos públicos y veremos esto exactamente hasta donde nos lleva.

Y hoy también habrá que echar un ojo a la comisión de Hacienda del Congreso para debatir el paquete fiscal del gobierno porque ya conocemos, y hoy lo publica el diario El Mundo, las exigencias de Puigdemont para aprobar los presupuestos.

Está exigiendo dejar a cero el déficit de Cataluña, son más de 22.000 millones. Si el resto de españoles han de poner con sus impuestos 22.000 millones para cubrir el dinero que los separatistas han dilapidado en su mala gestión y malversación del procés.

Y todo eso para sacar adelante además una nueva oleada de impuestos que está haciendo que hay varias declaraciones hay una muy interesante de Garamendi, el presidente de la CEOE, que se ha agregado creando alarma en sectores económicos quién va a invertir aquí, quién va a invertir en España.