Nos habían avisado que la DANA, que el temporal antes llamado borrasca sin más, todavía tenía mucho que decir. Habían alertado de que los últimos coletazos iban a sacudir con fuerza a Baleares y a los que estos días estáis en Mallorca o en Menorca -en general en el conjunto del archipiélago- os habían recomendado que mejor pasar el día de la virgen de agosto en casa.
Pues las previsiones se han cumplido. Una tromba de agua obligaba por la tarde a cancelar los aterrizajes en el aeropuerto de Son Sant Joan en Mallorca. Durante toda la jornada ya se habían producido cancelaciones y los retrasos fueron casi generalizados hasta que, por motivos de seguridad, se estableció eso que en el argot aeroportuario se llama RATE 0, que no es otra cosa que un protocolo que interrumpe las llegadas ante un peligro para el tráfico aéreo, en este caso por las condiciones meteorológicas.
Esta explicación es fácil de entender, pero muy difícil de asimilar cuando eres uno de los afectados, y el comienzo de tus vacaciones se ve directamente truncado por un temporal en pleno mes de agosto.
Hay miles de pasajeros que todavía no saben cuando van a poder salir de la isla rumbo a sus destinos. Está activado el comité de crisis entre ENAIRE, el gestor de navegación aérea de España, y las compañías para tratar de reordenar todos los vuelos que entre el miércoles y el jueves no pudieron salir.
Así estuvieron durante al menos dos horas. Y todavía hoy van a seguir recolocando pasajeros, y reprogramando vuelos que fueron cancelados.
Para que te hagas una idea de cómo puede afectar un temporal como el de estos días a un aeropuerto de uno de los enclaves más turísticos de España. En el aeropuerto de Palma solo este jueves había previstos 940 aterrizajes y despegues. 940 operaciones en avión de entrada o de salida de la isla.
El aeropuerto de Son Sant Joan no fue el único en el que se registraron incidencias en la isla. Los pasajeros de un tren de la línea entre Palma y Manacor tuvieron que ser evacuados por inundación de la vía. En concreto a la altura de la localidad mallorquín de Petra, lo que provocó también la suspensión temporal del servicio ferroviario en ese tramo.
Todo esto en Mallorca. En Menorca, la imagen que nos deja esta DANA es la de calles de municipios como Es Mercadal o Alaior convertidos en auténticos ríos urbanos.
Sótanos y casas inundadas, alcantarillas que no daban abasto y se convertían en fuentes al expulsar toda el agua que recibían, campos anegados, calles que parecían ríos, personas que tuvieron que ser rescatadas del interior de sus vehículos… En esos dos municipios de Menorca que te decía, en Alaior y en Es Mercadal se llegaron a recoger 200 litros por metro cuadrado. Por Mercadal pasa un arroyo, cuyo cauce se vio desbordado, lo que provocó que se tragara los coches y que el agua entrara en numerosas viviendas.
Además, el tráfico ha permanecido cortado durante muchas horas en buena parte de la isla, en carreteras que van desde esos dos municipios a Son Bou o a Fornells.
Y, como en Mallorca, el aeropuerto de Menorca también ha vivido este jueves una jornada plagada de incidentes, con cancelaciones y con desvíos de vuelos a otros aeródromos para esquivar la DANA.
Son los efectos del temporal y la pregunta es ¿para hoy qué? Ninguna alerta máxima, ninguna alerta roja, tampoco en Baleares, donde dirán adiós a la DANA, que todavía puede dejar algún chubasco, pero nada comparable con lo de ayer. En el resto, tiempo estable y una máxima de 40 grados en Badajoz.
Por lo demás, hemos cruzado el Ecuador de agosto, afrontamos esta segunda quincena del mes que nos va a situar al comienzo del curso político marcado por el mismo chantaje de como terminó al anterior. Una vez que Salvador Illa se pasea como presidente de la Generalitat de Cataluña, a Sánchez le va a tocar cumplir el acuerdo que ha firmado con los de Esquerra.
La financiación singular, el concierto económico es el elemento más destacado de ese pacto y con quien más problemas va a tener, no son los republicanos catalanes. O al menos a corto plazo. Más que nada porque en Esquerra andan ahora mismo a la gresca por ver quién toma las riendas del partido. Está los más afines a Oriol Junqueras y están los que se han posicionado junto a Marta Rovira. Por eso, el principal quebradero de cabeza de Sánchez ahora no es ERC. A quien tiene que convencer es a los suyos, con un cupo catalán de imposible encaje en la constitución, hasta que Pumpido obre el milagro.
El principal problema de Sánchez es explicar ante los suyos que solo para garantizar su permanencia en Moncloa, que solo para recuperar el poder en Cataluña 14 años después, ha dilapidado la solidaridad fiscal entre regiones y ha abierto el camino a perjudicar a una comunidad para perjudicar al resto.
Esta noche ha estado en la linterna de COPE, el expresidente de Aragón, Javier Lambán. Es uno de los barones socialistas con más peso, y aunque Sánchez le tiene en el punto de mira, sigue siendo el secretario general de los socialistas aragoneses, mal que le pese a la ministra portavoz, Pilar Alegría, que también es de Aragón.
Lambán ha puesto voz a muchos socialistas que la ven venir. Muchos, sobre todo altos cargos, no lo verbalizan porque ponen su puesto en riesgo. Pero saben que si el concierto económico sale adelante, van a tener muy difícil luego ir a sus paisanos a contarles milongas.
Las elecciones autonómicas serán en mayo de 2027. Las generales, si no hay adelanto, también ese año. Y Lambán vaticina un horizonte electoral oscuro si sale adelante el concierto económico para Cataluña.
El problema de Lambán, como el problema de Page o el del nuevo líder de los socialistas extremeños, que es Miguel Ángel Gallardo, es que ese discurso firme, contundente contra el separatismo no ha tenido ningún efecto práctico. Cuando han tenido que votar lo han hecho apoyando a Sánchez y avalando, por tanto, sus acuerdos con los soberanistas.
El voto de los diputados aragoneses en el Congreso, de los castellano manchegos, de los extremeños, hasta ahora, ha servido para avalar todos los cambios de opinión de Sánchez. Desde los pactos con Podemos, Bildu y toda la compañía... hasta los indultos, llegando a la amnistía. ¿Qué van a hacer con el concierto catalán? Pues están rezando para que en la tramitación parlamentaria se introduzcan modificaciones para que su conciencia no quede manchada una vez más. Porque tengan por seguro, que salvo contadas excepciones, votarán a favor.
Mañana es un día clave para Venezuela. La oposición ha convocado manifestaciones en todo el mundo para protestar por el pucherazo en las elecciones del 28 de julio. Aunque la comunidad internacional se ha pronunciado, no con la misma contundencia en todos los lugares -eso lo sabemos bien en España-, pero esos mensajes no han alterado para nada a Maduro y están siendo insuficientes para forzar una transición.
¿Qué sabemos? Que casi tres semanas después ningún organismo independiente ha podido analizar y valorar las actas de esas elecciones. Con tres semanas de por medio, Maduro ha tenido tiempo más que suficiente para alterar esas actas o vaya usted a saber qué. Sabemos también que la ONU ha denunciado la falta de transparencia, ante un hecho sin precedentes en una democracia que es no publicar los detalles del resultado de las urnas. Y sabemos también que el Consejo Nacional Electoral no cumplió con las medidas básicas de transparencia.
A partir de aquí, lo último es el pronunciamiento de varios líderes americanos para que se repitan las elecciones en Venezuela. Y habrá más de uno que piense... ¿pero qué broma es esta? Y no es ninguna broma, pero se entiende si te cuento que detrás de ese planteamiento están Lula da Silva en Brasil y Gustavo Petro en Colombia.
Es verdad que este jueves preguntaron al presidente de EE. UU. y Joe Biden hizo una de las suyas. Le preguntaron por si estaba de acuerdo con una repetición electoral en Venezuela y Joe Biden, que en demasiadas ocasiones ha evidenciado no saber dónde está, respondió que sí.
Ha tenido que salir la casa blanca a desmentir al presidente. Esto ha sido un clásico durante su mandato. Ha tenido que matizar al presidente y han señalado que no apoyan ni el plan de Lula da Silva ni el plan de Gustavo Petro.
Lo de la repetición es una broma de mal gusto, porque sería asumir el discurso de Maduro. Solo plantearlo es absurdo. Lo que hay que hacer es presionar para desmontar el fraude. Y esto lo ha explicado mucho mejor la líder de la oposición María Corina Machado.
Es lo último que nos faltaba después de que el Gobierno se haya puesto de perfil, después de que el Ejecutivo de Sánchez haya situado en el mismo plano a la oposición y al régimen de Maduro y después de que hayan blanqueado a José Luis Rodríguez Zapatero que es el mayor cómplice de las tropelías que sigue cometiendo el chavismo, con el reiterado ataque a los derechos humanos.