Herrera destapa el plan de Sánchez frenado por Moncloa: "Saben que no puede"
El presentador de 'Herrera en COPE' ha puesto el foco en una de las intentonas de Sánchez por mejorar su imagen que finalmente no verá la luz
Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Este viernes se celebra la Conferencia de Presidentes más polémica que se recuerda. Con un Sánchez que ya solo ve sus vacaciones a la vuelta de la esquina, el presidente busca sacarse una foto que refrende su argumentario de la cogobernanza y respalde la satisfacción con la que este jueves se 'colgaba' la medalla de oro por su gestión. Muy a su pesar, Cataluña no acudirá y País Vasco le ha hecho pagar cara su presencia, generando un estado de enfado en las comunidades, incluso en alguna socialista.
El caso es que fiel a su faceta más publicitaria, Pedro Sánchez tenía un plan que desde Moncloa se frenó en la noche de este jueves para evitar según qué imágenes, porque eso es lo que de verdad importa en la Presidencia del Gobierno, la imagen proyectada.
Herrera destapa el paseíllo frustrado del presidente Sánchez
Siendo en Salamanca la Conferencia de Presidentes, Herrera cuenta cómo "tenían previsto ir andando desde la Plaza Mayor hasta el lugar donde se realiza la reunión". Un plan que se vio atajado desde la misma Moncloa: "Pero anoche la Moncloa se cargó el paseo y van en coche", ha confirmado Carlos Herrera.
"¿Por qué?", se pregunta el presentador de 'Herrera en COPE' y es que él mismo da la respuesta al motivo de Sánchez y su equipo para evitar lo que, según las loas que ha vertido sobre su propia gestión, debería haber sido un paseo triunfal: "Porque temen la reacción de la calle. Porque saben que este tipo no puede salir a la calle sin que le digan cuatro cosas", ha argumentado Herrera.
"Pongan ustedes a Sánchez a pasear por el centro de Valencia, por el centro de Sevilla, por el centro de Madrid. Verán ustedes las lindezas que le dicen. Acuérdense de Ceuta y eso que a Ceuta fue cumpliendo con su deber", ha recordado en referencia a los abucheos que recibió el presidente cuando se presentó en la ciudad autónoma tras la invasión masiva que sufrió Ceuta con el beneplácito de Marruecos.
La Conferencia de Presidentes más complicada
El pasado 13 de julio, Pedro Sánchez ponía fecha a la Conferencia de Presidentes y generaba las primeras críticas, por parte de Isabel Díaz Ayuso. La presidenta madrileña aseguraba que según el reglamento, la Cumbre debe convocarse "con 20 días de antelación y dejando claros los puntos del orden del día", al mismo tiempo que aprovechaba para recordar que no habían recibido ninguna orden ni habían negociado nada.
Una orden del día que ha sido recibida apenas unos días antes y en la que pueden leerse más citaciones que puntos del día. En concreto se fija la llegada de los presidentes, 25 minutos más tarde se convoca la llegada de Sánchez y poco tiempo después hará acto de presencia Su Majestad Felipe VI. El Rey estará poco más de una hora, cuando tendrá lugar su despedida, junto con unas declaraciones de Sánchez y otras del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
La reunión en sí misma dará comienzo a las 11 de la mañana y cuenta con dos escuetos puntos del día. El primero de ellos es el estado de situación de la campaña de vacunación y los próximos pasos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y en segundo lugar se tratará la presentación de la “Estrategia Nacional 2030 frente al Reto Demográfico”. Unos puntos considerados escasos para muchos y faltos de contenido para otros, calificados como "una broma" y "una tomadura de pelo".
Otra de las polémicas es la escasa preparación del encuentro, ya que no ha habido reuniones previas. "Una reunión solo es eficaz si previamente ha habido reuniones preparatorias (...) esto no ha ocurrido nunca con Sánchez", aseguraba Enrique López, consejero de Justicia de la Comunidad de Madrid.
País Vasco y Cataluña, en el ojo del huracán
Los presidentes de Cataluña y el País Vasco son los protagonistas de otras dos polémicas generadas en torno a la cumbre. Aragonés no asistirá este viernes a Salamanca, el presidente del Govern ha asegurado que su intención es tener una reunión bilateral con el Gobierno Central y ha afirmado que el encuentro es simbólico. Se trata de la única ausencia, que ha sido criticada duramente por el resto de presidentes.
Por su parte, Urkullu ha sido foco de todas las miradas desde que este miércoles anunciara que sí acudirá a la Conferencia pero con condiciones. El Lehendakari ha aceptado la invitación de Sánchez después de que este aceptara el traspaso de ciertos impuestos al Gobierno autonómico vasco. Una concesión especial por parte de Sánchez, catalogada como "chantaje", que no ha sentado nada bien al resto líderes autonómicos.