"La Mezquita-Catedral de Córdoba es un bien privado de la Iglesia pero a disposición del público"

José Juan Jiménez, portavoz del Cabildo de la Mezquita-Catedral de Córdoba, ha sido entrevistado este martes en ‘Herrera en Cope’ coincidiendo con la emisión del programa desde el Palacio Episcopal de la ciudad.

Preguntado por la ocurrencia de la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio (PSOE), que junto con Federico Mayor Zaragoza, exdirector general de la Unesco, pretenden arrebatarle a la Iglesia la propiedad del templo, Jiménez ha señalado que la Mezquita-catedral “en ningún momento ha sido un bien público, ha sido un bien privado de la Iglesia pero a disposición del público”.  En este sentido, ha dicho que los fieles y los turistas así “lo gozan y disfrutan”, y de modo especial los cordobeses, que “tienen una situación privilegiada de cara a este templo que es suyo”.

Pero es más, es la propia Iglesia la que financia las obras de restauración sin recibir subvenciones de ningún ente público. “Aquí siempre estamos en mantenimiento y conservación. En los últimos 21 años hemos dedicado más de 24 millones de euros” a obras de este tipo, ha señalado el portavoz del Cabildo, que también ha dicho que la Mezquita-Catedral de Córdoba es el tercer monumento más visitado de España y el primer monumento más valorado de Europa y el tercero del mundo. “Este año nos hemos quedado a 90.000 para llegar a los 2 millones de visitantes”, ha manifestado

El portavoz del Cabildo ha explicado que la conservación actual de la Mezquita se debe a la propia existencia de la Catedral, pues fue el Rey Fernando III quien invitó a los musulmanes a que ”no la destruyeran”, a que saliesen “con todos los bienes que quisieran pero sin destruirla”. De este modo, logró que se mantuviera en pie el templo.

Por este motivo, Jiménez no comprende las críticas de algunos sectores políticos afines a la izquierda, que acusan a la Iglesia de que está “cristianizando el templo” –lo que podrían hacer porque es de su titularidad-, pero “no solamente no estamos haciendo eso sino que nos hemos preocupado por poner en valor toda la presencia del arte islámico”, ha explicado el portavoz del Cabildo. “Son paranoias que se le ocurren a estos personajes para mantener vivo un enfrentamiento” absurdo con la Iglesia, ha concluido.