Veranos lejanos en tres canciones
Con Fidel Moreno, escuchamos tres grandes canciones del verano de tiempos remotos: 1969, 1976 y 1984.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Tres canciones antiguas, pero todavía vivas, tres canciones que hablan del verano como una estación propicia para la fiesta, el amor, el desamor, y el encuentro con la playa, la noche, el sol, la luna y las estrellas. Esta claro que nada hay como el calor para entrar en comunión con la naturaleza cósmica que nos rodea.
Fidel Moreno, autor del ensayo "¿Qué me estás cantando?", comienza este repaso con 'María Isabel', el gran éxito del verano de 1969, una rumba compuesta hace medio siglo por Los Payos, tres amigos sevillanos. Es una canción que retrata un día y una noche en una playa desierta con una chica y una guitarra. La verdad es que más allá de unas recomendaciones básicas para evitar insolaciones, aquello de “Coge tu sombrero y póntelo,/ vamos a la playa, calienta el sol”, no cuenta demasiado. La tercera estrofa desliza la idea de un posible escarceo playero, cuando habla de la luna, una luna celosa de los ojos de la chica y de su forma de mirar… ahí parece que pasa algo, pero no nos lo cuenta. O mejor dicho todo queda en el misterio de ese estribillo tarareado, que no dice nada y lo dice todo.
El siguiente tema es una de las canciones del verano más festeras que existen, '¿Qué pasa contigo, tío?' de Los Golfos, la canción del verano de 1976. Esta rumba es un diálogo en el que un chaval entregado a una fiesta ininterrumpida va explicando su vida y el por qué de la resaca que tiene en ese momento. Lo interesante desde el punto de vista sociológico es que este tema compuesto por Julio Seijas y Luis Gómez Escolar fue parte del exorcismo humorístico que en aquellos años trataba de quitarse la losa de seriedad que había dejado el franquismo y también la cultura militante del antifranquismo. Esta canción es un alegato en favor de la fiesta. Esta canción daba una respuesta rumbera a la preocupación moral de las personas de orden que, en los comienzos de la transición, trataban de distinguir en vano entre libertad y libertinaje.
Por último, damos otro salto en el tiempo, al lejano verano de 1984. Vamos a despedirnos con 'Yo no te pido la luna', una adaptación libérrima de una canción italiana que fue interpretada en español por la cantante mexicana Daniela Romo y por Fiordaliso, que era la cantante que popularizó la canción original en Italia y de quien escuchamos su versión. Es curioso porque la versión en español dice lo contrario que la canción en italiano. En italiano es una letra dolida donde la mujer lo que quiere es alejarse, estar en otro lado y no pensar tanto en un hombre del que ya está cansada. Esta canción quedó en el quinto puesto en el Festival de San Remo de 1984, y habla de una mujer que quiere separarse, ella le dice a él que han pasado ya muchos inviernos y que ya no sabe lo que siente, que quiere dedicarse a sus cosas, tener más tiempo para ella misma y que no la busque, que la deje irse.