Romanelli, párroco en Gaza: "La gente está angustiada, a los heridos los llevaron al hospital pero otros están bajo los escombros"
El párroco de la ciudad palestina habla con COPE horas después de los bombardeos que han dejado esta madrugada centenares de muertos

Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
El Ejército de Israel ha vuelto a lanzar ataques sobre la Franja de Gaza en la madrugada de este martes, rompiendo el alto el fuego que se mantenía desde hace casi dos meses con el grupo islamista Hamás. Unos bombardeos en los que, al menos, 400 personas han muerto y otras 500 han resultado heridas en los bombardeos israelíes, según ha informado la agencia palestina Sanad y otros medios presentes en el enclave, citando fuentes del Gobierno gazatí y próximos a Hamás.
Allí está el párroco Gabriel Romanelli, que ha explicado en La Linterna que la gente está “muy angustiada”. “Los heridos han sido llevados al Hospital Anglicano que está a unos 700 metros de aquí, que se convirtió en un punto de referencia de Gaza”. Explica que ellos, durante la guerra, han asistido a muchos enfermos con el dispensario interno y el externo, pero hoy “supongo que por donde estaban los bombardeos y a la hora que fue, los llevaron directamente, a los que pudieron sacar, porque también hay gente bajo los escombros, los llevaron al Hospital Anglicano”.

La familia Maarouf, sobre las ruinas del campamento de refugiados de Jabaliya, en la Franja de Gaza
“No hay paz sin justicia”
Insiste el párroco Romanelli que “no hay que dejarse vencer por el mal”. “Hay muchos problemas en el mundo entre naciones, así como entre familias y entre personas, pero hay que buscar vías verdaderamente de reconciliación, de justicia y de paz”, apunta. Eso sí, matiza que el cese de hostilidades, de agresiones, no es sinónimo de paz ni de justicia. “Como decía San Juan Pablo II, no hay paz sin justicia, no hay justicia sin perdón, sin reconciliación”. Una frase que no quiere decir que haya que esperar reconciliación para que haya paz, sino que “uno puede ir creando las condiciones”, añade en un audio de Romanelli a COPE.
“Un paso necesario es el alto del fuego de manera permanente, el permitir que la gente, la mayor parte, los dos millones de habitantes de Gaza que son civiles, que puedan vivir, que puedan reconstruir sus casas, pidiendo a Dios y a todo hombre y mujer de buena voluntad que hagan los pasos necesarios con la liberación de todos los que están privados injustamente de su libertad, los rehenes para el bien de ellos mismos, de sus familias, como suelen hacer con canje de prisioneros y la ayuda a toda la población de Gaza, pero en este momento, quien tenga poder, que pueda convencer que es necesario un alto de las hostilidades”, concluye.

La escuela Al Tabien, destrozada por los bombardeos israelíes
Los bombardeos en Gaza
Y es que, desde casi un año y medio, salvo los dos meses que duró esta tregua, los gazatíes han visto demasiadas muertes, demasiados heridos, demasiadas casas destruidas y un día más de guerra no va a solucionar, sino que va a empeorar la situación general. “Nuestra situación en la franja de Gaza es muy grave, nos hemos despertado hoy con los bombardeos en la madrugada, nosotros estamos bien con nuestros refugiados que son unas 500 personas, la mayor parte de la comunidad cristiana, católica y ortodoxa están aquí, además de los niños y las personas con discapacidad que ya de antes de la guerra vivían bajo el cuidado de las hermanas misioneras de la caridad de la madre Teresa de Calcuta”, aclara.
Confiesa que están haciendo todo lo que pueden hacer: rezar constantemente con los laicos, los religiosos, las religiosas del Verbo Encarnado, la congregación de Romanelli, “y ayudando a todos los que podemos ayudar, todos estos meses hemos ayudado a miles de familias”. Sin ir más lejos, explica el párroco, el mes pasado, en febrero, han llegado a ayudar a más de 20.000 familias con comida, gracias a la ayuda de varias asociaciones y personas privadas.