Jaime Masjuan explica cómo pueden ayudar los biomarcadores a detectar el alzheimer antes de los síntomas

En nuestro país existen 800.000 personas que padecen alzheimer, según datos de la Sociedad Española de Neurología. Año tras año se diagnostican hasta 40.000 nuevos casos. Y, muchas veces, se llega tarde. Pero ahora, esto podría cambiar. Un estudio de la Sociedad Americana de Química ha detectado un nuevo biomarcador, clave para una detección más temprana de la enfermedad. Esto tras haberse publicado un hallazgo esta misma tarde en el que un grupo de investigadores, del Instituto de Investigación Biomédica (IRB) de Barcelona, ha identificado las células responsables de la recaída y la siguiente fase, la metástasis, en el cáncer de colon, después de la extirpación del tumor primario. En el caso del alzheimer, en 'La Linterna' hemos hablado con nuestro divulgador científico, Jorge Alcalde, que nos ha explicado qué son los biomarcadores y lo que se ha conseguido con esta detección.

"Los biomarcadores son moléculas, proteínas, sustancias, cualidades fisiológicas, que indican que en nuestro cuerpo van a pasar algo en el futuro. En este caso son unas proteínas, en el caso concreto del alzheimer que, cuando están presente de una manera alterada nos indican que esa persona, posiblemente, tiene más riesgo de padecer alzheimer", explicaba Jorge Alcalde. "En este caso, lo que los científicos estaban buscando desde hace mucho tiempo son biomarcadores, estas señales de alarma, que nos permiten con tiempo suficiente -antes de que aparezcan los síntomas- saber que ese cerebro puede padecer un alzheimer en el futuro", proseguía comentando, añadiendo que hoy ya hoy tenemos unos marcadores previos que nos permiten saber que una persona tiene o va a tener alzheimer, "pero en procesos tardíos". Sin embargo, cuanto antes tengamos los biomarcadores -antes de que aparezcan los síntomas-, es "más fácil atajar alguno de sus síntomas", tal y como señalaba Alcalde, y preparar al paciente y a sus familiares para afronten la situación que se les plantea.

Para ir más allá, en el programa hemos contactado con Jaime Masjuan, jefe del Servicio de Neurología del Ramón y Cajal, para hablar de este descubrimiento de los biomarcadores y el motivo de su importancia. "Hasta ahora, los tratamientos que se han ido probando ha sido en pacientes con una enfermedad establecida y ya avanzada", comentaba, agregando que lo que necesitan es "algún tipo de prueba, fácil, como son las que detectamos en la sangre, que a una gran cantidad de población pueda servir para poder experimentar con seguridad en los medicamentos nuevos que se están probando en ese tipo de pacientes".

La novedad de estos biomarcadores

Jaime Masjuan ha explicado lo que aportan estos biomarcadores respecto a lo que hasta ahora tiene la ciencia como herramientas, para intentar anticiparse en la enfermedad: "La importancia de estos biomarcadores, si en un futuro se confirman su valor predictivo, es que se puedan hacer con un análisis de sangre. Entonces, a partir de ahí, ver si estos biomarcadores realmente son predictivos, qué valores hay que tener y, a partir de ahí, poder definir cuanto antes cómo hay que tratar a estos pacientes", comentaba el jefe del Servicio de Neurología del Ramón y Cajal. Además, Masjuan también ha hablado de la importancia del tiempo a la hora de detectar el alzheimer: "Cuando el paciente empieza a tener ya síntomas manifiestos de una demencia, el número de neuronas en nuestro cerebro que se han muerto ya es muy grande", decía. Sin embargo, aún queda mucho estudio por delante con esta enfermedad. Masjuan ha sido claro a la hora de asegurar si esta patología se acabará en un futuro no muy lejano: "La OMS puso el objetivo en el 2025 y ya lo ha retrasado hasta el 2030. Cura del alzheimer yo no creo que lo vaya a haber. Otra cosa es que haya fármacos que sean capaces de poder retrasar los mecanismos de la enfermedad", aseveraba, reiterando que, "la cura como tal en las enfermedades degenerativas cerebrales, todavía estamos muy lejos de poder hablar de ese término tan lejos", zanjaba el jefe del Servicio de Neurología del Ramón y Cajal.