Expósito: "Ni siquiera Sánchez o Marlaska se han dignado a aparecer en el acto de las víctimas del 11-M"
La Linterna se enciende en Atocha 20 años después del ataque: "Me duele mucho que ni siquiera un día como hoy seamos capaces de mostrar cierta unidad"
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Encendemos esta Linterna desde la estación de Atocha, cuando se cumplen 20 años de aquel 11 de marzo de 2004, cuando sin exagerar un pelo cambió la historia de España.
Seguramente seguimos, desde entonces, con el pie cambiado. Porque aquella matanza trajo consigo una polarización política que aún sufrimos. No se trata de dar lecciones, evidentemente, ni de aplicar aquello de "después de visto, todo el mundo es listo", pero, mira, de entrada, personalmente, me duele mucho que ni siquiera un día como hoy seamos capaces de mostrar cierta unidad.
Una unidad en serio. Ni siquiera Pedro Sánchez o el ministro del Interior se han dignado a aparecer en el acto de las víctimas del 11-M. Bueno, al parecer no tenemos remedio, se confirma. Bueno, hoy, 20 años después, desde aquí, desde esta estación de Atocha, sí puedo sacar algunas conclusiones.
Uno, el ejemplo para el mundo de aquella reacción, organización, respuesta, solidaridad, sanidad, investigación, emergencias, protección civil y Estado de derecho. Inolvidable aquel juicio abierto al mundo.
Dos, el terror yihadista tras el 11-S y el 11-M. Tres años antes fueron las Torres Gemelas, y en 2004, Madrid. El objetivo pasó a ser y es Europa.
Tres, para la yihad no hay excusas. Ni Irak entonces, ni hoy Gaza. Alguien me comentó por aquellas fechas que para el terrorismo islamista, el factor tiempo no existe, saben esperar.
Nuestro tiempo se mide por las siguientes elecciones, a los cuatro años, o a los cuatro días, como aquel 11-M. Pero para los yihadistas, el tiempo es la eternidad al grito de 'Alá es grande'.
Cuatro, siguen aquí, solo en 2023 casi 90 yihadistas fueron detenidos en España. Nos acercamos a los yihadistas detenidos en España aquel 2004 del 11-M. Y hoy, son más jóvenes, más formados, más viajeros y con nuevas tecnologías.
Y cinco, aquellas elecciones no debieron celebrarse. No fue ETA, evidentemente. Llegó Zapatero y de ahí, el cinturón sanitario que sigue abrochado y el procés. El paréntesis de los años de Rajoy, y Pedro Sánchez. Un Pedro Sánchez que ya no sabe qué hacer para honrar a Zapatero.
Y una doble posdata para este encendido de La Linterna desde esta estación de Atocha. Lo peor, el terror yihadista vino para quedarse en Nueva York, Madrid, París, Londres, Barcelona. Y lo mejor, el honor y el servicio de tantos servidores públicos y sobre todo, la dignidad de las víctimas del terrorismo.