Un joven decide cambiar su vida tras una comida con su familia española de acogida: entre broma y broma

Durante el año pasado, más de 40.000 personas entraron en nuestro país de manera irregular. Todos cruzaron las fronteras buscando una nueva oportunidad para ellos mismos y para sus familias. Musta vino a España para eso, para ayudar a los suyos. Salió desde Tánger y llegó a Algeciras escondido en los bajos de un autobús. Lo intentó en dos ocasiones, la primera vez le vieron rápido y fue deportado a su país de inmediato. Pero la segunda tuvo algo más de suerte y, aunque le encontraron, le mandaron a un centro de acogida.

Musta llegó a España con solo 9 años. Hoy, casi 20 años después, su vida ha dado un giro radical. Una historia que han contado en 'La Tarde' y de la que se han hecho eco en 'La Linterna'. El joven es un ejemplo de fuerza de voluntad y de crecer en la idea de dar todo por la familia, y es que las diferencias entre España y nuestro país vecino son notables. En Tánger, los niños juegan en la calle y se juntan con chicos mucho más mayores. Teniendo esto en cuenta, Musta ha confesado que su infancia fue dura, ya que los nueve años de un niño de allí no son los mismos que uno de aquí.

Musta consiguió llegar a España en el segundo intento. Iba con un amigo y los dos corrieron para meterse en los bajos del autobús. Imagínate el hueco tan pequeño en el que consiguieron esconderse, debajo de las escaleras que tenía el vehículo. Cuando llegaron los dos a Algeciras, un Guardia Civil les vio y les sacó del autobús. Pero en esta ocasión, les mandaron a un centro de menores.

Una comida con su familia española cambió la vida de Musta

Cuando cumplió 18 años, llegó en acogido a la casa de Sandra y su familia. Poco a pocos, comenzó a pasar más tiempo con ellos y terminó encontrando una familia, su familia española. Estuvo viviendo allí dos años y fue en una comida con ellos, entre broma y broma, cuando decidió que quería estudiar y opositar para ser Guardia Civil. Siempre había tenido admiración por las fuerzas y los cuerpos de seguridad del estado y esta decisión le cambió la vida.

Lo cierto es que entre Musta y la familia de Sandra hay muy buen rollo. Para ella, Musta es su hermano. Son muchos años juntos, hace prácticamente 10 que se conocen y desde la primera vez que se vieron, Sandra quiso dejarle claro que ella iba a ser su familia española y que le ayudarían en todo para que su familia de Marruecos, pudieran tener una mejor vida.

Ahora, Musta ha vuelto a casa de la familia de Sandra para estudiar las oposiciones a Guardia Civil. Su vida ha cambiado totalmente y, como no puede ser de otra forma, Musta no puede estar más agradecido.