La psicología tras la guerra: qué es un 'duelo múltiple' y cómo evitar que acabe en esquizofrenia
La psicóloga Aurora García Moreno analiza en COPE los trastornos que puede provocar una exposición a meses de conflicto bélico
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Una de cada cinco personas que viven en una zona afectada por el conflicto desarrollan trastornos mentales, especialmente los niños. Casos de estrés agudo, depresión, ansiedad, falta de sueño... Y es que es muy complicado estar con una sensación de incertidumbre continua. Ieva es traductora de español y dice que desde que comenzó la invasión hay mucha tensión.
“Hubo mucho miedo en los primeros meses porque, si atacan a sus hermanos y a sus vecinos, por qué no a sus otros vecinos que colaboraban con Ucrania anteriormente”. Si ellos hablan de miedo, imagina cómo es el día a día de los ucranianos, que conviven con el sonido de las alarmas o los bombardeos. Muchos tienen que protegerse en refugios o en los metros para salvar su vida. Con la angustia de no saber si cuando salgan, su casa seguirá en pie o si sus amigos y familiares habrán muerto.
Por eso, por los micrófonos de La Linterna ha pasado la psicóloga Aurora García Moreno que analiza con Ángel Expósito el impacto psicológico de ocho meses de guerra en Ucrania. “Esta exposición durante tantos meses a un suceso tan traumático como una guerra les lleva a un estado de ansiedad muy alto, incluso a la depresión”.
Qué es el duelo múltiple
La primera ansiedad les puede ayudar a sobrevivir pero también a estar en un estado de alerta constante. “Aunque la persona lo esté viviendo en primera línea o indirecta van a presentar un grado de estrés agudo, también por ver cómo sus seres queridos están sufriendo. El problema es que estas vivencias pueden volver a activarse y reexperimentarse, como en sueños”, aclara la psicóloga.
Sobre el duelo, la colaboradora de La Linterna explica que también están pasando por todas sus fases que, seguramente con el tiempo se irá calmando. “Muchos han perdido a familiares y a amigos, mientras que otros su libertad”. Además, señala que son múltiples duelos porque “al final tienen unas exigencias adaptativas, como la construcción de una nueva identidad”.
Cómo prevenir una esquizofrenia en niños
Otro de los puntos clave es el síndrome del refugiado. “Es un proceso psicológicos en el cual la persona no tiene síntomas muy acusados pero que van a aparecer cuando rehaga su vida. Se enfrentan a una vida sin trabajo, sin hogar, con sentimientos de culpa por sobrevivir, además de volver a su lugar de origen con miedo al regreso”, explica García Moreno.
Eso sí, concretamente sobre los niños señala que un trauma de esta magnitud en la infancia va a afectar a los procesos cognitivos. “La semana pasada una profesora me contaba que tiene una alumna con el padre en la guerra, y la niña se encuentra desorientada, imagínate lo que le pasa por la cabeza”, ejemplifica. Los niños son una población vulnerable, son más irascibles, no controlan habilidades adquiridas, puede haber retrocesos como el control del pis.
¿Cómo hablar de esto con los niños? “No es fácil, porque la mayoría está en refugios, viendo personas muertas por las calles, pero es importantes que, para que no se desarrolle en trastornos bipolares o la esquizofrenia, los adultos tendrían que dar prioridad a las inquietudes, evitar la sobre información y explicarles de forma clara y concisa lo que ocurre”, concluye.